Martínez-Lázaro dice que “el Gobierno se comporta con el cine como con un enemigo”

El artífice de “Ocho apellidos vascos” y “Ocho apellidos catalanes”, el director Emilio Martínez-Lázaro, cree que en España el cine “más que falta de apoyo” ha sufrido “animadversión del Gobierno”, al que acusa de comportarse como si el sector “fuera un enemigo”.

Martínez-Lázaro (Madrid, 1945) afirma en una entrevista con Efe que el valor principal de la cultura es que “puede unir mucho más a la gente”, ante retos actuales como “los separatismos”.

Por ello, el director madrileño reclama que las instituciones políticas “hagan un esfuerzo” por el sector cultural, que según sus palabras es “la base de la existencia de un país”.

Martínez-Lázaro es el protagonista de “El pasado es un prólogo”, un libro del historiador de cine Farshad Zahedi que repasa su carrera en el mundo del cine desde sus comienzos en los años 70.

El director alcanzó el reconocimiento internacional con “Las palabras de Max” (1978), un “filme experimental”, como él mismo lo define, que le valió el Oso de Oro del Festival de Berlín.

Su estilo actual, reconoce, se encuentra muy alejado de sus inicios, puesto que hoy dirige sus películas “a un público masivo”, pero rememora con cariño esos primeros pasos en su carrera, “indispensables para la evolución del lenguaje audiovisual”.

El responsable de comedias románticas como “El otro lado de la cama” y “Amo tu cama rica” considera que esta evolución en su cine, “que ha tocado todos los palos, desde el más dramático hasta las películas para todos los públicos”, es algo natural.

“Yo me he dejado llevar, consciente o inconscientemente, en esa dirección”, reconoce.

El director de “Las 13 rosas” o “La voz de su amo”, que fundó su propia productora después de trabajar en Televisión Española, lamenta que falten “formas de financiación alternativas” más allá de las televisiones.

En su opinión, parte del problema del cine actual es que “ya no existen productores como Elías Querejeta”, ni siquiera fuera de España.

“Es gracias a los productores por lo que el cine norteamericano llegó a ser tan importante, pero han desaparecido por el poder de los financiadores, ejecutivos de banco, no de cine”.

La ausencia de directivos formados en el séptimo arte ha llevado “al empobrecimiento del cine”, comenta Martínez-Lázaro, que pone como ejemplo las temáticas repetitivas de Hollywood, entre “remakes' y secuelas de superhéroes”

El director de “Lulú de noche” reivindica a personajes como Pilar Miró, responsable de la Dirección General de Cinematografía en los años 80, que “puso en marcha un sistema que relanzó al cine español” en el momento “que más lo necesitaba”.

Martínez-Lázaro cree que tradicionalmente “los gobiernos han sido poco cinéfilos”, pero espera que el siguiente presidente “baje el IVA cultural del 21%”, como primer paso de apoyo al sector.

El se confiesa “esperanzado” y afirma que quiere “seguir haciendo películas como declaración de optimismo” ante el futuro.

“El pasado es un prólogo”, asegura, es el resultado de sus conversaciones con Zahedi, una experiencia que fue, dice, “como estar en el diván del psiquiatra cinematográfico”.

El libro, que forma parte del trabajo del grupo de investigación de cine y televisión de la Universidad Carlos III de Madrid, es el octavo título de la colección Cuadernos Tecmerin.