Ribó consulta en las redes sociales la conveniencia de instaurar una tasa turística en València

El alcalde de València, Joan Ribó, ha sorprendido este miércoles con una original propuesta a través de la red social Twitter.

Ribó ha reabierto el debate sobre la conveniencia de crear una tasa turística en la ciudad lanzando un sondeo desde su cuenta oficial.

En la misma, argumenta que “una tasa turística de 2 euros, que es simbólica para quien nos visita, aportaría unos ingresos de 20 millones de euros anuales a València, que podríamos revertir en vivienda social y limpieza. Las grandes ciudades europeas ya lo aplican. ¿Qué opineas?”.

Hasta este momento, han participado en la encuesta 2.256 votos de los que un 56% de los usuarios de la red social afirman que estarían “plenamente a favor”, un 26% consideran que es “una opción intersante”, un 13% dicen que no les gusta la idea y un 5% que no lo tienen claro.

Al respecto, Ribó ha explicado que “la conocida como tasa turística que se aplica desde hace años en muchas ciudades europeas contribuye, por una parte, al control de la oferta ilegal de alojamientos, y por otra, permite destinar recursos a los servicios a la ciudadanía que destinan parte de su trabajo a fomentar precisamente un turismo de calidad”.

El alcalde ha añadido que “todos los vecinos somos conscientes de lo beneficioso de la llegada de visitantes a nuestra ciudad, de la misma manera que observamos los recursos públicos que se deben destinar para continuar teniendo una ciudad atractiva, que repercuten sobre la calidad de vida de nuestros barrios. Por ello, una tasa turística que repercuta sobre los servicios municipales es tan lógicamente positiva para la gestión del turismo y de la ciudad”.

Además de servir “para ejercer un control sobre asuntos como los apartamentos turísticos, de manera que nos aseguremos alojamientos legales y un turismo de calidad, diversificado y desestacionalizado”, ha comentado.

La conveniencia de aplicar una tasa turística autonómica se debatió en Les Corts, pero finalmente no hubo acuerdo, principalmente por las diferentes realidades turísticas de cada municipio.

Sin embargo, el Ayuntamiento podría crear una tasa propia sin necesidad del visto bueno de la Generalitat Valenciana.