Yatseniuk ordena llenar depósitos subterráneos con el gas procedente de la UE

El primer ministro de Ucrania, Arseni Yatseniuk, ordenó hoy llenar en verano los depósitos subterráneos con el gas procedente de la Unión Europea (UE) y seguir reduciendo las importaciones de la vecina Rusia.

“Esperamos un precio de gas de entre 250 y 300 dólares (por mil metros cúbicos) por parte de nuestros socios europeos, lo que es un poco menos que los 500 dólares que nos ofreció Rusia”, dijo el jefe del Ejecutivo ucraniano, citado por agencias locales.

Agregó que “la principal tarea (...) es llenar al máximo los depósitos subterráneos ucranianos en verano por el precio más bajo”.

“La caída del precio del petróleo nos ofrece la posibilidad de sacar provecho de la positiva coyuntura en el mercado y no pagar de más a Rusia”, aseveró Yatseniuk.

El jefe del Ejecutivo señaló que el 67 % del gas que importó Ucrania en el año pasado provino de la UE, mientras que a Rusia sólo le correspondió un 33 %.

“Ordeno seguir reduciendo paso a paso la cuota del gas ruso en el balance energético ucraniano”, aseveró.

Según los últimos datos del consorcio gasístico Naftogaz, las importaciones del gas ruso cayeron en enero un 64 % frente al mismo periodo del año pasado.

Kiev ha advertido en varias ocasiones que Rusia ya ha perdido en los últimos meses parte del mercado ucraniano en favor de las compañías europeas, por lo que “el regreso a las antiguas condiciones (de precios) conducirá a una mayor reducción de la presencia de Gazprom en Ucrania”.

Así reaccionó Nagtogaz a las advertencias del presidente de Gazprom, Alexéi Miller, de que a partir del 1 de abril Rusia eliminará todos los descuentos, por lo que Kiev tendrá que pagar en torno a los 500 dólares por cada mil metros cúbicos de gas.

Además, el Gobierno ruso exige a Ucrania el pago de 2.440 millones de dólares de deuda por el gas natural suministrado por Gazprom al país vecino en 2014.

A finales de 2014, Rusia, Ucrania y la UE se comprometieron a garantizar el suministro de gas ruso y su tránsito por Ucrania hasta marzo próximo, después de que Moscú recibiese “garantías” de que Kiev pagaría una parte sustancial de su deuda antes de finales de año y dispondría de fondos para las nuevas compras de gas.