Se acabó el refuerzo de personal para el SEPE (Servicio Público de Empleo Estatal). El sindicato CSIF ha lanzado este martes la alarma: el organismo que se encarga de tramitar las prestaciones a las personas en ERTE y en desempleo prescindirá de gran parte de los 1.500 interinos que se nombraron de apoyo por la pandemia de coronavirus, que incrementó muchísimo su carga de trabajo. Fuentes del Ministerio de Trabajo confirman el cese de 500 interinos este junio. En septiembre saldrán otros 500 trabajadores temporales y todo apunta a que otros 500 más serán cesados en diciembre si nadie lo evita, explican desde los sindicatos. En Trabajo responden que pidieron la renovación de todos los trabajadores y adjudican la decisión a “los ministerios competentes”. Es decir, a Hacienda y Función Pública.
Las primeras salidas, de 500 interinos, se producen ya este mes de junio. “La petición del Ministerio de Trabajo y Economía Social era la de renovación total y así lo trasladamos. Los interinos han hecho una labor extraordinaria durante todo este tiempo en el SEPE”, responden en el ministerio que dirige la vicepresidenta Yolanda Díaz. “La decisión corresponde a los ministerios competentes”, añaden en Trabajo.
En CCOO han mandado un comunicado muy crítico con el Ministerio de Trabajo. “Si esto fuera un ERE en una empresa, el Gobierno estarían poniendo el grito en el cielo, lo están haciendo con otras empresas donde el porcentaje de despidos en relación al volumen total de plantilla es sensiblemente peor. Pero claro, el recorte de empleo es el SEPE. No solo no dicen nada, sino que la Ministra de Hacienda y el Ministro de Función Pública son los artífices finales de esta decisión”, critica el sindicato. “No parece que el peso específico del Ministerio de Trabajo en este Gobierno sea de gran valor”, añaden la nota de CCOO.
El sindicato ha adelantado que ha pedido una reunión con los máximos responsables del SEPE y del Ministerio de Trabajo para pedir que se rectifique esta decisión. “Si estas son las soluciones de este Gobierno para el SEPE y esta es la forma de reconocer el trabajo realizado y de fortalecer el sistema de prestaciones, queda meridianamente claro que el conflicto será inevitable, la movilización arrancará de forma inmediata”, advierten.
Fin al refuerzo cuando sigue la gestión de la crisis
El SEPE tuvo que afrontar la crisis por la pandemia con una plantilla diezmada en los años pasados por recortes y una falta de renovación del personal jubilado. “En los últimos diez años se han perdido cerca de 3.400 efectivos por las políticas de recortes”, cifran en CSIF.
El organismo público se enfrentó así con esta debilidad de personal a un batacazo sin precedentes en el empleo: casi un millón de trabajadores perdió su empleo en dos semanas en marzo y se puso en marcha un sistema novedoso de ERTE por la pandemia, que llegó a tener bajo su manto a 3,4 millones de personas en el peor momento de la crisis.
El Ministerio de Trabajo incorporó a estos 1.500 interinos de refuerzo para el SEPE. Los sindicatos insistían en que seguía siendo una cantidad insuficiente para las necesidades de las oficinas. CCOO reclamaba 2.500 empleados, por ejemplo.
En un inicio, durante la avalancha de despidos y de nuevos ERTE, el servicio tuvo numerosas incidencias. Unos meses después, las quejas de los ciudadanos seguían, con miles de personas que denunciaban retrasos en el cobro de los ERTE y, sobre todo, la imposibilidad de que alguien les atendiera al otro lado del teléfono. El Ministerio de Trabajo siempre defendió que los retrasos afectaron a un porcentaje pequeño de trabajadores, por ejemplo del 2% en junio. Pero cuando el total es de 3,3 millones de personas, ese pequeño porcentaje alcanzaba aun así a mucha gente. Unas 66.000 ese junio, según las cifras oficiales.
CSIF, que ha difundido la noticia del cese de los interinos de refuerzo, ha manifestado su rechazo a esta decisión en un comunicado. “Supone prescindir de cerca del 20% de la actual plantilla, lo que pondrá en serio riesgo la viabilidad ante la carga de trabajo que se tendrá que repartir sobre las espaldas de los/as trabajadores”, destacan. En CCOO sitúan su peso en el 12% de la plantilla, “la práctica totalidad en atención directa a la ciudadanía tramitando y reconociendo prestaciones por desempleo”.
Hay que recordar que aún está vigente el sistema de ERTE por la pandemia, del que dependen unas 400.000 personas en estos momentos. En los ERTE es habitual la entrada y salida de trabajadores, así como el aumento o reducción de horas de actividad de los empleados afectados por los expedientes, posible gracias a la flexibilidad del mecanismo. Además, el total de personas desempleadas se situó en mayo en 3,8 millones, todavía por encima de las 3,2 millones de febrero de 2020, antes de que estallaran los contagios en España.
Los sindicatos denuncian que no llegan a todo el trabajo
En UGT también lamentan la noticia. “No podemos pagar las prestaciones, nos quedamos sin vacaciones y habría que cerrar oficinas”, denuncia Françoise Calvo, representante de UGT en el SEPE. La trabajadora del servicio público de empleo denuncia que, aun con los interinos de refuerzo, el SEPE sigue teniendo retrasos por la carga de trabajo que afronta y los déficits de plantilla previos. “Con esto más”, alerta. “En Costes y Función Pública desconocen el trabajo que se hace en el SEPE y no les importan ni los parados ni las paradas”, critica la sindicalista.
“La decisión es un despropósito, está fuera de cualquier argumentación razonable”, añaden por su parte en CCOO, que consideran que si no existe una “una rectificación inmediata”, el SEPE “no podrá evitar su colapso y un grave enfrentamiento con la representación de su plantilla”.
Los sindicatos denuncian que el cese de los primeros 500 efectivos se produce además en vísperas de vacaciones de muchos trabajadores del ente público, “con lo que la gestión de las prestaciones en un significativo número de unidades puede verse comprometida”, advierten en CSIF.
CSIF y UGT cargan contra el Ministerio de Función Pública, dirigido por Miquel Iceta, pero también señalan a Trabajo, que es el ministerio –ahora una Vicepresidencia del gobierno– del que depende el SEPE. “Si la ministra no lo evita, todos los interinos cesarán”, apuntan en UGT.
En CSIF reclaman la convocatoria de una oferta de empleo pública “extraordinaria y específica” para paliar el déficit estructural del SEPE. “Urge una dotación suficiente de recursos humanos, estructurales y profesionalizados”, reclama el sindicato. El Ministerio de Trabajo ha anunciado un cambio en las Políticas Activas de Empleo (PAE), para mejorar la inserción laboral desde las oficinas públicas de empleo a través de una atención más personalizada y con más orientación a los ciudadanos. Desde los sindicatos suelen advertir de que estas mejoras deben plasmarse en un refuerzo del personal para que realmente sean efectivas.