Has elegido la edición de . Verás las noticias de esta portada en el módulo de ediciones locales de la home de elDiario.es.
La portada de mañana
Acceder
Feijóo se alinea con la ultra Meloni y su discurso de la inmigración como problema
Israel anuncia una “nueva fase” de la guerra en Líbano y crece el temor a una escalada
Opinión - Junts, el bolsillo y la patria. Por Neus Tomàs
Sobre este blog

Viento del Norte es el contenedor de opinión de elDiario.es/Euskadi. En este espacio caben las opiniones y noticias de todos los ángulos y prismas de una sociedad compleja e interesante. Opinión, bien diferenciada de la información, para conocer las claves de un presente que está en continuo cambio.

Blindar la RGI en tiempos de incertidumbre

Lanbide es la institución que gestiona la Renta de Garantía de Ingresos (RGI).

0

Hay tiempos en los que el lenguaje se economiza, y no porque se use menos, sino porque la economía empieza a atravesarlo todo, hasta el punto de cambiar esa costumbre, casi ley, que te obligaba a hablar sobre la tendencia climática del día como recurso fácil para completar silencios incómodos. Hemos cambiado el “qué calor hace hoy, ¿verdad?” por el “a este precio no hay quien compre aceite”.  

Evidentemente, la economía y cómo nos afecta, hasta el punto de condicionar nuestra compra diaria, no es comparable al hecho de tener que sacar el paraguas de vez en cuando, con más o  menos fortuna dependiendo del porcentaje de acierto de nuestra meteoróloga de referencia. Valga la metáfora del clima para aclarar, que las consecuencias económicas del cambio “climático” provocado por otros, no pueden recaer en las personas menos protegidas.  

Recordemos que la tempestad que nos afecta está representada por una inflación desbocada que merma la capacidad de ahorro de la ciudadanía cuyo poder adquisitivo va decreciendo en un contexto inflacionario. Vivimos un contexto en el que el incremento de los precios de la energía, trasladado a bienes esenciales como la vivienda, el transporte y los alimentos, está repercutiendo de forma más grave en las rentas más bajas. Y la RGI, precisamente, es parte fundamental de ese escudo social que debe protegerlas.  

El principio de acuerdo al que han llegado el Gobierno Vasco y Elkarrekin Podemos-IU sobre la reforma de la norma que deberá regular la Renta de Garantía de Ingresos una vez aprobada, a nuestro entender, mejora la herramienta y por lo tanto fortalece ese escudo social al que hacíamos referencia. Ahora bien, esta valoración ha sido contrastada con nuestras aportaciones en un debate sobre la Renta de Garantía de Ingresos que, recordemos, lleva abierto desde el intento fallido del anterior Gobierno vasco de reformarla.  

Nuestra propuesta de mejora ha mantenido el objetivo de blindar política y económicamente la RGI, ampliando su cobertura a través de la modificación de la cuantía y de los requisitos de  acceso. Hemos visibilizado un marco europeo de referencia a través tanto del Parlamento europeo y su resolución de octubre de 2017 que realza que los regímenes de renta mínima deben garantizar unos ingresos por encima del umbral de la pobreza; como a través de la resolución del Comité Europeo de Derechos Sociales que señalaba, como motivo de incumplimiento de la Carta Social Europea en España, los requerimientos para acceder a la renta mínima sobre tiempo de residencia y la edad mínima exigidos en la mayoría de las comunidades autónomas.  

Con respecto a las cuantías establecíamos un contexto favorable al aumento de las mismas, basado en que existía un margen real de mejora con respecto a las cuantías propuestas derivado de la coexistencia del IMV y la RGI y la palanca de ahorro que suponía para el sistema vasco. En lo concreto proponíamos establecer como cuantía base la que cifra el umbral de la pobreza en España de manera que, a través de la adaptación de los porcentajes complementarios en función de la tipología de las personas perceptoras y el número de miembros de la unidad convivencial, pueda servir para articular unas cuantías más cercanas a la cifra que representa el umbral de la pobreza en Euskadi. 

La propuesta finalmente acordada establece como límite mínimo de la cuantía la cifra que marca la tasa de riesgo de pobreza a nivel estatal (60% de la renta mediana a nivel estatal). En estos nuevos términos, la cuantía se acerca al objetivo, ya señalado de forma reiterada por el  sindicato, de asegurar una cuantía que evite las situaciones de pobreza.  

Con respecto a la edad mínima de percepción de la RGI nuestra propuesta, mantenida en el  tiempo, siempre ha sido rebajarla a los 18 años de edad. Denunciábamos que la apuesta por el mantenimiento con carácter general de la limitación de los 23 años seguía persistiendo en la idea que ya se apuntaba en el diagnóstico del documento de bases de Mejora de la RGI del año 2017, cuando se afirmaba que “Euskadi se sitúa entre los países que permiten el acceso a la renta garantizada a una edad más tardía”. 

En este proceso de reforma hemos trasladado la propuesta de elaborar un estudio cuyo objetivo debiera ser cuantificar el costo real que supondría la rebaja de la edad de percepción de la RGI a los 18 años, teniendo en cuenta que con los requisitos que se establecían en la norma a debate,  el costo estimado pudiera ser muy inferior al valor “reputacional” de una renta percibida desde la mayoría de edad.  

Finalmente, en el acuerdo que se presenta, se rebaja a la mayoría de edad la posibilidad de percibir la renta de garantía de ingresos con los requisitos o cautelas necesarias para no confundir la finalidad de la RGI con la que pudiera tener una renta de emancipación.  

En todo caso, entendemos, que tanto esta medida, como la flexibilización de los requisitos de  empadronamiento y el aumento de las cuantías, se convierten en un elemento corrector troncal de la renta en la medida en que amplían la tasa de cobertura de la RGI. Estos elementos se suman a las mejoras que hemos ido detectando en los sucesivos borradores de la norma en las que se han recogido otras de nuestras aportaciones. Destacamos tres de  ellas.  

Con respecto al tratamiento que se hacía en la propuesta de las personas trabajadoras perceptoras de la RGI habíamos advertido que la norma debiera abordar la situación generada con la posible contratación en términos fraudulentos, en la medida en que se aprovechara la existencia de la renta como una especie de “complemento salarial público” a contratos precarios. Esta previsión ha sido recogida por la propuesta de norma que regulará la RGI, así como la eliminación del despido disciplinario como una de las causas de extinción de la prestación.  

Por otro lado, nos parece una mejora evidente la rectificación de la incomprensible excepción que  se ha mantenido en los borradores de esta propuesta que exigía una año de antigüedad en el  empadronamiento a las personas víctimas de violencia de género. Además, la disposición adicional primera, a nuestro entender, es mucho más garantista cuando hace referencia al uso de los sistemas biométricos, que en anteriores anteproyectos donde se  recogía el uso de la huella digital sin la seguridad jurídica necesaria. 

Ahora bien, recordamos en este punto algo que hemos repetido de forma constante, tanto cuando los partidos que sustentan el Gobierno vasco no tenían mayoría suficiente para sacar adelante la norma, como ahora que la tienen. Para CCOO de Euskadi estamos ante un debate identitario, en tanto en cuanto el sistema de RGI es parte de nuestro “patrimonio político, económico, social y moral”. La RGI y su reforma son demasiado importantes como para caer en  la tentación de buscar una aprobación sin los consensos plurales, transversales y  mayoritarios que esperamos como sociedad.  

Objetivo: erradicar la pobreza 

CCOO de Euskadi ha estado trabajando mucho para lograr este consenso con los agentes claves que han negociado, señalando desde el principio cuáles eran los elementos que iban a posibilitar desbloquear las resistencias para llegar a un acuerdo de carácter progresista que mejorara la cobertura de la renta. 

En este sentido, agradecemos a las organizaciones que han logrado el acuerdo que hayan conjugado, a nuestro juicio de forma oportuna, las principales demandas de muchas de las organizaciones que comparecimos en las ponencias parlamentarias y la necesidad del consenso que señalábamos. Aún así, entendemos que todavía existen márgenes de negociación y mejora de la norma para lograr un acuerdo más amplio, con las fuerzas que han contribuido también, en  mayor o menor medida, a la construcción y refuerzo del escudo social a nivel estatal. De esta manera podremos reforzar aquel objetivo que señalábamos al principio de blindar políticamente la RGI. 

Quizá el término blindar resulte para algunas personas pretencioso y excesivo, pero no conviene que nos confiemos cuando hablamos de normas de este calado. La reacción de la derecha y ultraderecha en el Parlamento Vasco ante este acuerdo calificándolo como una fuente de fraude permanente o como “un sueldo vitalicio que desincentiva la entrada en el mercado laboral” nos marca un camino que nos obliga a proteger herramientas como la RGI.  

En este caso, Leonard Cohen llevaba razón cuando decía que “a veces, sabes de qué lado estar, simplemente viendo quiénes están al otro lado”. El día 17 de octubre celebramos el día internacional contra la pobreza. Lo hacemos, como en otras ocasiones, junto a otras organizaciones sociales y algunas sindicales, demandando al  gobierno vasco y a los grupos parlamentarios que aprueben una ley digna que erradique la  pobreza. Para nosotras, hoy, estamos más cerca de ese objetivo.  

Sobre este blog

Viento del Norte es el contenedor de opinión de elDiario.es/Euskadi. En este espacio caben las opiniones y noticias de todos los ángulos y prismas de una sociedad compleja e interesante. Opinión, bien diferenciada de la información, para conocer las claves de un presente que está en continuo cambio.

stats