Las tarjetas Bat, Barik y Mugi podrán usarse en todos los transportes públicos de Euskadi a finales del presente año, con los que se alcanzará la plena interoperabilidad en los transportes de cara potenciar la movilidad sostenible. Así lo ha anunciado la consejera de Movilidad Sostenible, Susana García Chueca en la presentación del detalle de los presupuestos de este departamento para 2026, que en su conjunto ascienden a 581,7 millones de euros, lo que supone un 2,5% más que el año anterior, es decir, una subida por debajo de la media departamental, del 4,1%.
El proceso para el uso indistinto de las tarjetas en cualquier transporte, que es complicado y que lleva bastante retraso, es un paso previo a la puesta de algunas de las medidas contempladas en el Plan de Movilidad Sostenible de Euskadi, que cuenta con más de un centenar de actuaciones para la próxima década, y en el que uno de los mayores retos está impulsar la integración tarifas para tener un modelo unificado, aunque con especificidades por territorios históricos. Se busca “premiar con mayores descuentos a quienes más utilicen el transporte público, teniendo en cuenta a colectivos concretos como el de las personas jóvenes” frente al modelo lineal de bonificaciones actual, iniciado en 2022. Este apartado tendrá una partida de 300.000 euros para avanzar en los trabajos.
Precisamente en lo que se refiere a los descuentos en los transportes para impulsar la movilidad sostenible, la consejera ha señalado que de cara al próximo año, como ha ocurrido en ejercicios anteriores, “habrá que esperar a ver lo que decide el Gobierno de Madrid”. “Si hubiera bonificaciones para el siguiente año, el Gobierno vasco se sumará a ellas como lo hemos venido haciendo hasta ahora, y el resto de operadores y administraciones tendrá que decidir qué posición adopta llegado a este punto, al igual que lo han hecho hasta ahora”, ha indicado. En el caso de que no hubiese modificaciones por parte del Gobiernoo central, la consejera ha señalado que Euskadi “tiene su punto de partida que es la gratuidad de los menores de 12 años” que es una medida que será “ ya estructural” a partir del año que viene ha dicho, independientemente de lo que haga el Gobierno central.
Los descuentos hasta los 15 años vigentes en este momento dependen de la decisión que tome al respecto el Gobierno central. También se mantendría el 20% de descuento para los títulos de mayor uso ajustadas a las particularidades de cada territorio por parte de los diferentes operadores, como adelantó este periódico. “¿Qué pasaría con el 10% para el resto de administraciones?”, se ha preguntado. “Llegados a este punto y habrá que no solo negociar y hablar con el resto de administraciones,sino también internamente con las propias haciendas vascas”, ha indicado para solventar la financiación. La consejera ha resaltado en este punto el esfuerzo que ha hecho hasta ahora el Gobierno vasco para bonificar el transporte con más de 50 millones de inversión.
En su comparecencia, la consejera se ha referido también a varios de los proyectos que tiene en marcha el Gobierno, algunos de los cuales muy polémicos entre los vecinos, como la línea 4 del Metro que unirá el barrios de Rekalde y Matiko. Por primera vez este proyecto tiene una dotación presupuestaria para llevarse a cabo, para este próximo año será de 1,2 millones de euros el próximo año. La consejera ha señalado que esta línea “que unirá la zona sur de Bilbao con el resto del territorio y con el resto de la capital es muy necesaria para su vertebración social y territorial”. “Los vecinos y vecinas de esta zona, especialmente del sur de Bilbao de los barrios de Rekalde e Irala iban años demandando su conexión por metro”, ha recordado.
En este sentido, ha insistido en que “el compromiso del Gobierno vasco es absoluto con el desarrollo y la ejecución de la línea 4”. “Ya llevamos meses negociando y agilizando en todo lo posible el proceso”, ha recordado. Y ha agregado: “Diría que falta sellar el acuerdo con la Diputación Foral de Bizkaia, pero que por nuestra parte el acuerdo está a punto”. Ha indicado además que el “Gobierno vasco está siendo muy generoso en dicho acuerdo, tanto en el trazado como en la financiación”. “Estamos anteponiendo las necesidades de movilidad de los vecinos y vecinas por encima de cualquier otra cuestión”, ha apuntado en la Cámara, adelantando que puede ser que la financiación de la obra no sea la 50% con la institución foral. Hay que recordar que el trazado que quería la Diputación no coincidía con el del Gobierno.
Respecto a la línea 5, que contará con 53,7 millones, que llevará el metro hasta Galdakao, la consejera se ha mostrado más inflexible sobre la reclamación de los vecinos de Usansolo para tener una parada en “lo que dicen que es el centro”, ya que consideran que es una inversión que no se justifica. “No responde a criterios de solvencia”, ha dicho.
También ha destacado la construcción de una nueva parada del tranvía de Bilbao en Los Caños (4,4 millones), el inicio de las obras de la ampliación del tranvía de Vitoria al barrio de Zabalgana, que comenzarán el próximo año (2,1 millones) y la finalización y puesta en servicio de la pasante soterrada del Topo en Donostia y de la variante ferroviaria Altza-Galtzaraborda entre la capital guipuzcoana y Errenteria. Los dos tramos entrarán en servicio en 2026 y cuentan con un presupuesto de 28,2 y 25,3 millones de euros, respectivamente. Por su lado, la reforma de la estación de Anoeta reservará una partida de 8,8 millones, y la finalización de las obras de las terminales de Gernika y Bedia con 1,5 millones. En las cuentas públicas está recogido el proyecto de extensión del tranvía al barrio bilbaíno de Zorrozaurre y se contempla una partida para la finalización del proyecto constructivo del intercambiador de Riberas de Loiola en Donostia, asimismo.
Por otra parte, 130 millones se dirigen al servicio que proporciona Euskotren en la red propia del Gobierno vasco, además de 92,8 millones al servicio de Cercanías recientemente transferido al Ejecutivo autonómico y operado por Renfe. En un futuro pasará a llamarse Lottu. De estos últimos, 3,4 millones irán destinados al desarrollo del servicio de Vitoria. García Chueca ha destacado que ha aumentado su uso un 35% desde mayo hasta septiembre tras su creación como mejora de la línea convencional existente. “Parece que es un servicio con una buena acogida”, ha dicho.