El presidente de la Junta de Extremadura, Guillermo Fernández Vara, ha mostrado su satisfacción por la reciente creación de la Mesa del Arroz de la región, un órgano que ha considerado como una “magnífica” oportunidad para el crecimiento del sector en nuevos mercados.
Fernández Vara ha hecho estas declaraciones ante los medios de comunicación tras la reunión mantenida con los representantes del sector que integran la Mesa del Arroz de Extremadura, que le han presentado su proyecto.
Se trata de un proyecto, en palabras de Fernández Vara, que llega en un momento “crítico” para el sector desde el punto de vista positivo, ya que permitirá el crecimiento y el aumento de la presencia de Extremadura en los nuevos mercados arroceros.
Para que esto sea posible debe haber “unidad” y esta es, precisamente, ha subrayado, la característica principal de la Mesa del Arroz, que ha conseguido la integración de las cooperativas y del sector comercial en torno a una iniciativa que busca conseguir además la Denominación de Origen del arroz extremeño.
Al respecto, el presidente autonómico les ha transmitido que el crecimiento del sector debe plantearse como un aspecto “primordial” ante el que no debe existir otra alternativa.
A su juicio, Extremadura tiene que ser “muy ambiciosa” y continuar con la labor que se está llevando a cabo por parte del Gobierno regional para un “crecimiento sostenido, permanente y con calidad”.
En esta línea, ha finalizado Fernández Vara, el proyecto “debe intentar” aumentar la calidad del arroz y trasladar sus preocupaciones al Ministerio y la Unión Europea para que se solucione la problemática del etiquetado y se precise el origen del producto y la calidad con la que se elabora.
Cesión de edificio
Durante su visita a Don Benito el presidente extremeño asistió también a la firma, con el alcalde de la localidad José Luis Quintana, del acuerdo de desafección del inmueble de la Cámara Agraria para su cesión al Ayuntamiento, edificio del que hasta ahora el consistorio disponía de la cesión de uso.
Tras este acuerdo, el Ayuntamiento de Don Benito cederá la utilización de este patrimonio a las organizaciones profesionales agrarias para continuar dando servicio a los agricultores y ganaderos. “Creo que no pueden haber edificios ociosos, y las administraciones públicas tienen la obligación de ponerse de acuerdo para sacar a los edificios el máximo rendimiento. Y este caso es un claro ejemplo de esa idea”. En ese sentido, Vara aludió a la necesidad de buscar fórmulas entre la Junta, diputaciones y ayuntamientos para dotar a este tipo de inmuebles de contenidos.