“La crisis muestra lo que llevamos años denunciando: este sistema solo genera pobreza”
Hace ahora un mes, la ONG Implicadas no Desenvolvemento (Implicadas en el Desarrollo) celebró su asamblea de socios. Nombró a la periodista Lucía López Bayo, que lleva en la organización ocho años, como nueva presidenta, después de haber trabajado ya en áreas de comunicación o de fortalecimiento en las redes dentro de la propia asociación. Ahora, nos explica en esta entrevista los planes de futuro.
¿Cuáles son los próximos objetivos de Implicadas?
Implicadas lleva trabajando en Galicia y en los países del sur, principalmente en la India, desde hace 16 años. La organización ha pasado por diferentes procesos y ahora tenemos una estructura estable, tanto en lo relativo al personal como en cuanto a la sostenibilidad económica. El pasado fin de semana iniciamos un proceso de planificación estratégica para los próximos cinco años y los objetivos generales son consolidar esta estructura, también en lo que se refiere al voluntariado que colabora con nosotros, y trabajar más el campo de la sensibilización, de intervenir más en los debates políticos y sociales.
En esta época de crisis brutal y recortes, ¿es más necesaria que nunca esa sensibilización, así como implicarse en los problemas derivados de las decisiones políticas?
Las dos cosas van de la mano. Estamos en una situación de crisis que pone de manifiesto lo que hace tiempo que venimos denunciando: que el sistema político en el que vivimos, dominado por los mercados, no funciona y solo genera pobreza aquí en Occidente y en los países del sur. La crisis pone sobre la mesa de manera más clara esto y la gente lo ve con mucha más claridad también. Esto nos permiten seguir poniendo de manifiesto todo lo que venimos defendiendo y también acercarnos a más gente, porque comprende mejor nuestros mensajes.
¿Se ven en el deber de priorizar los proyectos en Galicia sobre los de los países del sur debido a la crisis?
No, no nos obliga a priorizar. Seguiremos en la misma línea, pero habida cuenta de que lo que hacemos aquí en Occidente repercute en otros países. Nosotros somos responsables de lo que pasa en otras partes y la gente tiene que ser consciente de ello. Nuestra filosofía de trabajo en Galicia procura que la gente pueda crear esa conciencia crítica, analizar lo que ocurre y actuar de diferentes maneras, de manera individual con sus actos o participando en organizaciones como la nuestra.
¿Está la gente más concienciada?
La gente está más receptiva a los mensajes porque la crisis viene a demostrar lo que nosotros llevamos advirtiendo desde hace tantos años. La gente lo ve más claramente porque le está repercutiendo directamente.
Supongo que la concienciación por parte de las Administraciones no es la misma...
Obviamente, no. Se están recortando las ayudas a la cooperación, hay una propuesta de reforma para la ley de subvenciones que va a afectar a todas las organizaciones... Desde el tercero sector ya se está advirtiendo de que esa modificación, que mete en el mismo saco a todo tipo de asociaciones, supondría una manera de financiarse similar a la de las empresas y para las organizaciones sociales es imposible trabajar así. Muchas de ellas se verán obligadas a cerrar.
¿Supone eso también un problema para Implicadas?
En Implicadas, desde hace años, nuestra metodología de trabajo se basa en no depender exclusivamente de los fondos públicos. De hecho, en 2013 casi el 100% de los fondos fueron propios y no tuvimos ninguna subvención de la Xunta de Galicia. Las organizaciones tienen que ser independientes económicamente, lo que no quiere decir que las administraciones no tengan que distribuir el dinero público destinados a esos objetivos sociales. Nos financiamos con donaciones, las cuotas de los socios que tenemos y con actividades de recaudación.
¿En qué posición ve a las ONG de cara a los próximos años?
Lo importante es el trabajo que hacen las ONG a lo largo del tiempo y de manera coherente. Esa es la manera de llegar a la gente, de tener credibilidad y de tener apoyos. Obviamente, las organizaciones van a tener que replantearse sus maneras de sustentarse, pero no es imposible. Una de las funciones de estas organizaciones es trabajar en la sociedad civil y lanzar mensajes que la gente entiende, que comprende y que crean conciencia... Las personas pueden ir creando su propia conciencia crítica a través de los mensajes que reciben y no creo que los fondos económicos nos vayan a privar de eso. Es más una cuestión de trabajo continuo y de concienciación.