Has elegido la edición de . Verás las noticias de esta portada en el módulo de ediciones locales de la home de elDiario.es.
La portada de mañana
Acceder
El PSOE convierte su Comité Federal en un acto de aclamación a Pedro Sánchez
Las generaciones sin 'colchón' inmobiliario ni ahorros
Opinión - El extraño regreso de unas manos muy sucias. Por Pere Rusiñol

Puzzlephone y la fuga de cerebros: un móvil finlandés de padres españoles

Los modelos de Puzzlephone

Cristina Sánchez

Los grandes inventos pueden surgir de grandes enfados si el inventor, en lugar de limitarse a proferir insultos y buscar la sección 'reclamaciones' en la web del aparato estropeado, se devana los sesos hasta que averigua la solución del problema. Alejandro Santacreu es uno de esos creadores. El botón 'home' de su iPhone dejó de funcionar, y comenzó a pensar por qué una pieza tan utilizada era tan difícil de reparar.

Le llegó la inspiración y la llamó PuzzlephonePuzzlephone. Un móvil modular cuyas partes pudieran separarse y arreglarse de forma independiente sería la solución a problemas como el de su iPhone. Subió un vídeo a Youtube en enero de 2013 (que, según cuenta a HojaDeRouter.com, tuvo muy poco éxito) para explicar cómo funcionaría su puzle electrónico.

UN PROYECTO UNIVERSITARIO ESPAÑOL... EN FINLANDIA

Pero su idea de Puzzlephone quedó aparcada en ese momento. Meses después, decidió marcharse a Finlandia. Cogió una maleta y a sus gatos y se fue a probar suerte con su mujer a Helsinki. Tras estudiar dos años de ingeniería de telecomunicaciones, una FP de Productos Electrónicos y haber trabajado por cuenta propia y ajena en España en variopintos negocios (desde un restaurante a una empresa de dispositivos electrónicos), su sensación era de asfixia: sentía que aquí ya no podía construir nada.

Su intención era dedicarse a exclusivamente al estudio, que por algo Finlandia tiene uno de los mejores sistemas educativos del mundo. Se prometió a sí mismo no emprender nada. Y comenzó a estudiar 'Facility Management' en la Universidad Laurea de Ciencias Aplicadas.

Tan solo un mes después, renunció a sus votos. “Vi un cartel de un concurso de ideas y como soy un culo inquieto me apunté y rescaté la idea de Puzzlephone”, nos cuenta. La idea gustó tanto que le invitaron a presentarla en el campamento para emprendedores Cambridge Venture Camp, organizado por su universidad y la británica.

Como la Universidad Laurea no quería que Alejandro se fuera con las manos vacías al campamento, le concedieron 5.000 euros en tan solo una semana para que pudiera crear una web y un vídeo para presentar su proyecto. La tarea la realizó otro de los españoles detrás de Puzzlephone: José M. Sánchez. Alejandro y él vivían en Helsinki, pero no se conocieron presencialmente, sino a través del grupo de Facebook 'Españoles en Finlandia'.

Sánchez partió hacia el país nórdico en 2006 con una beca Erasmus, con el fin de completar sus estudios de Comunicación Audiovisual. Y decidió dejar las maletas allí. “Me di cuenta de que en Finlandia todo era distinto, la gente es más honesta. En Helsinki solo tenía que demostrar que era bueno, me consideraban un profesional por los resultados. En Madrid alguien tenía que hablar de mí, mientras que aquí todo funciona por méritos”, nos relata.

En Finlandia ha sido autónomo y empresario (montó su propia productora) y actualmente tiene un puesto de responsabilidad en una agencia de publicidad. Interesado por todo lo que suene emprendedor, Sánchez confió desde un primer momento en Puzzlephone. “Me pareció un proyecto interesante porque se trata de innovación de producto, en un momento en el que vivimos de las aplicaciones”, explica.

NACIDO EN LA TIERRA DE LOS NOKIA

Tras el primer impulso, Alejandro comenzó a llamar a todos los timbres de Finlandia. La agencia pública de desarrollo local Otaniemi en la ciudad de Espoo, colindante con Helsinki, confió en su idea y comenzó a ayudarle. Gracias a ello, Santacreu volvió a España con su Puzzlephone para el congreso de emprendedores Mobile 4YFN celebrado en el marco del Mobile World Congress de Barcelona. Mobile World Congress

La zona es un hervidero de 'startups' y la cuna tecnológica del país nórdico. En Espoo siguen estando los restos de Nokia, tras la venta de su división de móviles a Microsoft, que supuso un duro golpe para Finlandia. Muy cerca se sitúan los cuarteles generales de Rovio, la empresa de los 'Angry Birds'. A pocos minutos en coche, ya en Helsinki, conviven Jolla, la compañía creada por extrabajadores de Nokia que lanzará próximamente su propia tableta después de su exitosa campaña de 'crowdfunding'; y Supercell, la creadora del popular videojuego 'Clash of Clans'.

Alejandro describe el área de Otaniemi como un lugar para dar rienda suelta a la imaginación. “Puedes alquilar una oficina de 'coworking' al lado de otras 300 empresas de tecnología. Si necesitas cualquier cosa, te levantas de la mesa y estás hablando con la agencia de desarrollo que tiene en su cartera los teléfonos de todas las personalidades de la tecnología de todo el mundo”, explica Santacreu.

El fundador de Puzzlephone nos cuenta que la propia forma de ser de los finlandeses ha contribuido a que su proyecto crezca en los últimos meses. “Los finlandeses no tienen ninguna maldad, ellos mismos dicen que son muy inocentes. Llegas a alguien y le dices a bocajarro quién te envía y cuál es tu proyecto. Puede que te diga que no, pero es un 'no' genuino: no te la va a jugar”, asegura Santacreu.

Nunca se ha reservado información a la hora de hablar de su proyecto con nadie. Así ha logrado convencer también a la Universidad Aalto en Espoo o al prestigioso centro de investigación alemán Fraunhofer IZF para que le presten su apoyo.

ESPAÑOLES, FINLANDESES Y BRITÁNICOS

Además de José M. Sánchez y Alejandro Santacreu, hay otros españoles en Puzzlephone. Enrique Cantó, licenciado en ADE y cursando ingeniería industrial, conocía desde hace años a Alejandro y comenzó a echarle una mano como 'hobby'. Ayudó desde el principio con la parte mecánica del proyecto, diseñando un primer modelo en madera.

De momento, Enrique sigue en España, aunque se plantea marcharse a Finlandia en cuanto se consolide la empresa. “No lo veo como emigración forzosa, al contrario, me apetece irme. Quiero que mis hijos tengan las ventajas competitivas de la educación finlandesa que aquí en España no van a tener”, nos cuenta Cantó.

Santacreu ha ido completando el equipo a través de contactos y recomendaciones. “No todo el mundo está dispuesto a decir que trabaja para una promesa en acciones que puede que sea algo o puede que no”, subraya. Quien ha querido sumarse lo ha hecho por confianza en que Puzzlephone va a salir adelante.

La idea ha crecido hasta hacerse internacional. El asesor en temas de seguridad (afincado también en Finlandia), el responsable de redes sociales y comunicación o el colaborador en la estrategia de negocio también son españoles.también son españoles Los dos diseñadores y el 'chairman' son finlandeses, así como la responsable de marketing, Agra Apele, que trabajó en el mismo puesto para Nokia en Letonia durante más de 10 años. Mientras, dos británicos están desarrollando desde Reino Unido el primer prototipo funcional de Puzzlephone.

“Yo creo que cuando tienes un equipo tan multicultural, ganas mucho: es una idea que ha tenido a su vez muchas enfoques distintos”, explica José M. Sánchez. “A Alejandro le ha sido mucho más fácil encontrar ese equipo en Finlandia de lo que hubiera sido encontrarlo aquí”, subraya Enrique Cantó. Un equipo que no está formado precisamente por jovencitos: casi todos los profesionales de esta 'startup' tienen entre 30 y 40 años.

De momento, ya han fundado la empresa que respalda la marca Puzzlephone, Circular Devices, un nombre que hace referencia a los principios de la economía circular: fabricar, usar, reparar y reutilizar, según nos cuenta Santacreu. Las videoconferencias se han convertido en la oficina de esta compañía. Esperan que el primer prototipo de Puzzlephone esté disponible a finales de año, para comenzar a comercializarlo en el segundo semestre del año que viene. Si todo marcha bien, los miembros del proyecto acabarán mudándose a Finlandia.

El creador de Puzzlephone ni se han planteado trasladar la empresa a España. “El acceso a internet en Finlandia es muy barato. Necesitamos transporte, comunicaciones y energía baratos y eficientes, sin ellas no puedes trabajar. Esos tres aspectos en España están estrangulados y en Finlandia funcionan realmente bien”, nos cuenta Alejandro. No en vano, en Finlandia, un país con un PIB per cápita superior al de España, la energía eléctrica es un 40% más barata y Helsinki es una de las ciudades con la factura eléctrica más barata de toda la Unión Europea. Todo ayuda.

Puzzlephone busca nuevos cauces de financiación y el Estado finés sí les está proporcionando ayudas. Acaban de superar la primera fase de un programa de financiación de TEKES, la Agencia Finlandesa de Financiación para la Innovación.

2015, ¿EL AÑO DE LOS MÓVILES MODULARES?

Santacreu ha querido que el desarrollo del prototipo se lleve a cabo en Europa en lugar de llevarlo a Asia, a lugares como Shenzhen, el Silicon Valley chino del 'hardware'. “Lo más rápido hubiera sido llevarlo a China”, nos explica, pero este creador quiere promover el 'in-sourcing'. “Estoy intentando hacer todo lo que puedo en Europa, aunque somos conscientes de que las primeras producciones de Puzzlephone tendrán que venir de un país asiático”, señala Alejandro, que defiende la importancia de los proyectos europeos.

Habrá que esperar a 2015 para ver cómo evoluciona la carrera de los móviles modulares, ya que también está previsto para esa fecha el lanzamiento de los 'smartphones' del Proyecto Ara. Puzzlephone ya es considerado una clara competencia para los teléfonos por piezas de Google, aunque su diseño es mucho más sencillo: consta de un cerebro (el procesador y la cámara), un corazón (las baterías y la electrónica secundaria) y una columna vertebral (la pantalla LCD, los altavoces y el micrófono). Solo eso.

Puzzlephone quiere publicar estándares para que todos los fabricantes de 'hardware' puedan desarrollar sus propios módulos para estos teléfonos. “Respetamos la estructura habitual de los fabricantes actuales: todos tenemos un Puzzlephone en el bolsillo”, nos dice Santacreu, contento de que su proyecto vaya a ver la luz después de un año de esfuerzo.

“Me gustaría también innovar en España, porque al final es una pena que Finlandia se beneficie de nuestras mentes”, concluye José M. Sánchez. “Con Puzzlephone, estamos muy contentos de lo que nos ha pasado, pero por otra parte estoy triste de que nos tenga que pasar aquí”.

El proyecto de un universitario español pasará su prueba de fuego como empresa en un país nórdico: paradojas 'made in Spain'.

---------------------------

Las imágenes de este reportaje son propiedad, por orden de aparición, de Puzzlephone y Technopolis Plc (3).

Etiquetas
stats