El debate final para la alcaldía de Nueva York muestra a Cuomo y al republicano Sliwa frente al progresista Mamdani: “Mis rivales tienen miedo”

Nueva York es la mayor ciudad de EEUU. Y quién sea su alcalde cruza va más allá de los límites de la ciudad. No en vano, el presidente de EEUU habla cada día de las elecciones municipales, y cada día insulta al candidato con más posibilidades de ganar, el vencedor de las primarias demócratas, el socialista democrático Zohran Mamdani. Trump, además, sigue presionando para que sólo haya dos papeletas y se retire el candidato de su partido, Curtis Sliwa, quien no se identifica con el movimiento MAGA del presidente de EEUU.

Tanto Cuomo como Sliwa mostraron más nervio y audacia que en el debate previo, mientras que Mamdani se mostró conservador para evitar errores que le pudieran penalizar en el último tramo de campaña.

Salvo sorpresa inesperada de última hora, habrá tres papeletas: la de Mamdani, la de Sliwa, y la de Andrew Cuomo, el perdedor de las primarias demócratas, referente de esa vieja guardia del establishment del Partido Demócrata, que dimitió en 2021 de su cargo de gobernador para afrontar 13 denuncias por acoso sexual.

Precisamente en relación con esas denuncias se produjo uno de los momentos más tensos de la noche, cuando Mamdani le dijo a Cuomo qué tenía que decir a las denunciantes, una de las cuales se encontraba entre el público. Y lo único que fue capaz de decir el ex gobernador de Nueva York fue que salió indemne del proceso judicial.

El acoso también fue utilizado por Sliwa contra Cuomo, cuando le preguntó si conocía el significado de la palabra “no”.

En el debate, Cuomo, Mamdani y Sliwa evidenciaron sus diferentes agentas para abordar temas clave como el coste de la vida, la seguridad pública y la educación. Así, Cuomo propuso contratar a 5.000 nuevos agentes de policía y construir 500.000 nuevas viviendas.

Mamdani, por su parte, abogó por una congelación de los alquileres y 200.000 nuevas viviendas asequibles.

Sliwa, a su vez, elevó la apuesta policial abogando por contratar 7.000 nuevos policías.

En materia de educación, Mamdani fue el único candidato que apoyó la toma de decisiones compartida cediendo soberanía por parte del Ayuntamiento, mientras que Cuomo y Sliwa defendieron el control del alcalde.

Los candidatos también debatieron el cierre de la prisión de Rikers Island, con Cuomo y Sliwa oponiéndose al cierre inmediato, frente a Mamdani, que pidió cumplir el calendario previsto para su cierre en 2027.

A lo largo de la noche Mamdani defendió una de sus principales medidas, la gratuidad del transporte en autobús para aumentar el número de usuarios y reducir las emisiones, así como su apuesta por una subida notable del salario mínimo, a lo que se opusieron sus rivales. Mamdani abogó por 30 dólares la hora para 2030 y Sliwa y Cuomo sugirieron 20 dólares.

Otro momento relevante de la noche fue cuando Cuomo afirmó que “existe una tensión entre el estado, que defiende sus presupuestos, y la ciudad, que se ve perjudicada por el estado”. Y añadió: “Esto tiene que cambiar, y la ciudad tiene que mejorar”. Mamdani le respondió minutos después: “Siempre es un placer escuchar a Andrew Cuomo inventarse sus propios datos en cada debate. Acabamos de escuchar a un exgobernador decir con sus propias palabras que el estado ha estado perjudicando a la ciudad. ¿Quién dirigía el estado? Era usted, gobernador, quien lo dirigía, era usted durante años”.

La sombra de Trump

Por encima de todos los debates sobre medidas concretas para la ciudad de Nueva York, la discusión ha tenido a un invitado que no estaba presente, el presidente de EEUU, que tiene en su mano los fondos federales que pueden servir para ayudar a una ciudad a mejorar o para asfixiarla económicamente y políticamente.

Y Trump ya ha anunciado que su intención es utilizar su poder para perjudicar a la ciudad si el alcalde es Mamdani, en lo que supone un chantaje político en la recta final de la campaña.

“He pasado el último año escuchando a los neoyorquinos y sé lo que realmente les quita el sueño: si pueden permitirse o no llevar una vida segura y digna en esta ciudad. Yo tengo planes para nuestro futuro. Mis oponentes solo tienen miedo”, ha dicho Mamdani: “El títere de Donald Trump es Andrew Cuomo. Si enciendes la televisión cualquier día, escucharás a Donald Trump decir que su candidato a la alcaldía es Andrew Cuomo y que quiere que sea alcalde, no porque sea bueno para los neoyorquinos, sino porque es bueno para él. Donald Trump se presentó con tres promesas: con la promesa de crear la mayor fuerza de deportación de la historia de Estados Unidos; la de perseguir a sus enemigos políticos y con la promesa de reducir el coste de la vida. Si quiere hablar conmigo sobre el tercer punto de ese programa, siempre estaré dispuesto y preparado. Pero si quiere hablar sobre cómo llevar a cabo el primer y el segundo punto de ese programa a expensas de los neoyorquinos, lucharé contra él en cada paso del camino”.

“Donald Trump quiere a Mamdani”, ha terciado Cuomo: “Ese es su sueño porque lo utilizará políticamente en todo el país y se hará con el control de la ciudad de Nueva York. No se equivoquen, será el presidente Trump y el alcalde Trump, y se hará con el control de la ciudad. No tengo ninguna duda. Lo único que dijo fue que, tras las encuestas, tiene que elegir entre un demócrata y un comunista”.