Acapulco, vigilada

Uno de los ataques más macabros perpetrados por los carteles de la droga que operan en México ha provocado una inmediata reacción por parte de las autoridades del país. El asesinato de 28 personas en Acapulco ha provocado que tanto el Ejército mexicano como la Policía Federal se hayan trasladado a esta ciudad portuaria del estado de Guerrero, para garantizar la seguridad de los ciudadanos.

Así lo ha anunciado el coordinador de delegaciones de la Policía General de la República (PGR), Bernardo Espino del Castillo, quien ha asegurado que un grupo de fuerzas especiales de la Policía Federal ha llegado a la ciudad para incrementar la seguridad, al igual que peritos y agentes del ministerio público federal para ayudar en las investigaciones.

Por su parte, el secretario del gobierno del estado de Guerrero, Israel Soberanis Nogueda, ha dado a conocer que la reunión del grupo coordinación Guerrero ha establecido las estrategias y acciones pendientes para garantizar la seguridad de los ciudadanos, según recoge el diario mexicano El Universal. Soberanis ha descartado precisar a qué cárteles pertenecen las personas ejecutadas y ha aclarado que la ola de violencia tiene como fin “confundir y generar terror a la sociedad”.

Soberanis ha informado que como parte de estas acciones, el gobernador del estado, Zeferino Torreblanca Galindo, ha gestionado una serie de reuniones en la Ciudad de México con el secretario General de Gobierno Federal y el de Seguridad Pública, Francisco Blake Mora y Genaro García Luna, para abordar asuntos relacionados con la inseguridad y a la vez, generar acciones coordinadas que coadyuven a disminuir los factores de riesgo.

Un macabro suceso

Los cuerpos de las 28 personas asesinadas fueron encontrados la noche del pasado viernes en Acapulco. Una quincena de los fallecidos fueron encontrados decapitados frente a un centro comercial de la ciudad, una de las más turísticas del país.

Los cuerpos correspondían a personas de entre 25 y 30 años y uno de ellos estaba calcinado, dentro de un vehículo incendiado. Todos ellos serían presuntas víctimas del crimen organizado, ya que había dos narcomensajes, según ha informado el diario El Universal citando fuentes de la Secretaría de Seguridad Pública del estado de Guerrero, cuya principal ciudad es Acapulco.