Akasvayu regresa a la competición
El Unicaja, séptimo clasificado, recibe al Akasvayu Girona, octavo, un rival directo en la lucha por hacerse con un billete para los 'play-off' y que, sin duda, querrá resarcirse de su dolorosa derrota (54-79) en la final de la Copa ULEB ante el DKV Joventut el pasado domingo. Los costasoleños, que cuentan con las mismas victorias (16) que sus rivales, han disfrutado de una semana y media sin competir. Por ello, podrían aprovechar ese mayor descanso, para hacerse con un triunfo que les aleje en la tabla tanto de los gerundenses como del Kalise Gran Canaria, que le acecha a sólo una victoria de distancia.
Para ello, el técnico, Sergio Scariolo, podrá contar con el pívot Ndong, una vez superadas sus molestias de la semana pasada, por lo que se prevé que la lucha en la pintura será una de las claves para dirimir el choque. El Akasvayu Girona, por su parte, afronta el encuentro después de haber sido finalista de la Copa ULEB, en la que no pudo llevarse el título al caer ante el DKV Joventut, aunque dejó buenas sensaciones y la derrota en la final no ha hecho perder confianza al equipo de Pedro Martínez, aunque está por ver si el esfuerzo físico le pasará factura en Málaga.
La exigencia de haber jugado tres partidos en tres días en la fase final de un torneo puede condicionar al conjunto gerundense en su partido ante el Unicaja, aunque en las filas del Akasvayu nadie olvida la trascendencia del choque, que pone en juego la séptima plaza del campeonato en solitario a falta de otros cuatro partidos para terminar la fase regular.
EL LEÓN APURA SUS OPCIONES DE SALVACIÓN.
En el otro partido de mañaná, el Grupo Begar León recibe en el Palacio Municipal de Deportes de la capital leonesa al Pamesa Valencia (20.45 horas/Punt 2), que regresa a la competición doméstica tras sumar una nueva decepción en la fase final de la Copa Uleb disputada el pasado fin de semana en Turín, donde cayó a las primeras de cambio ante un Joventut muy superior. El cuadro leonés, que de perder certificará su descenso a la Liga LEB, afronta un tramo de final complicado, sin nada en juego aparte del orgullo de un equipo que en ningún momento ha logrado asentarse en la competición.
El Baloncesto León, que lleva tres jornadas sin conocer la victoria, no gana en casa desde la jornada 19, cuando se impuso al Kalise Gran Canaria. Desde entonces, sus únicas tres victorias han sido como visitante, en las pistas del Granada, el Fuenlabrada y el Tau Cerámica. El Pamesa, por su parte, llega a León con la intención de olvidar con una victoria su pobre paso por la 'Final a Ocho' de la Copa Uleb. El cuadro valenciano, que dio una mala imagen ante el Joventut y sólo reaccionó en el último cuarto, buscará consolidar en su visita al Palacio Municipal de Deportes la quinta plaza de la clasificación.
El conjunto dirigido por Fotis Katsikaris, que se está mostrando más regular en la Liga ACB en las últimas jornadas, necesita la victoria para no dar alas a un iurbentia Bilbao que parece haber salido del bache de juego y apunta a la quinta posición.
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