Greenpeace, a juicio por Garoña
Ayer comenzó el juicio contra 29 activistas de Greenpeace por instalar, según la organización ecologista, un contenedor de resistencia en la entrada principal de la central nuclear de Santa María de Garoña, en Burgos, el pasado 20 de noviembre. En total 60 personas participaron en esta “protesta pacífica” que según Greenpeace sólo quería exigir “al gobierno socialista el cumplimiento de su compromiso de cierre de las centrales nucleares y el cierre inmediato de la instalación”.
Además, los activistas querían recordar a la opinión pública el compromiso electoral del PSOE de “sustituir de forma gradual la energía nuclear en España por energías seguras, limpias, y menos costosas, cerrando las centrales nucleares […] potenciando el ahorro y la eficiencia energética y las energías renovables, la generación distribuida y las redes de transporte y distribución local”.
Según Greenpeace, esta vista supone la reanudación del juicio contra los activistas, que había sido suspendido el pasado 3 de febrero por decisión del juez, que alegó que no se habían citado a algunos testigos pertenecientes a los Cuerpos de Seguridad del Estado que intervinieron en el operativo que puso fin a la protesta pacífica.
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