La cara más divertida de la Guardia Civil

Como si de Sancho y Quijote se tratara, la pareja de la Guardia Civil cabalga a lomos de sus bicicletas en la portada del libro. A ellos también les ha afectado la crisis. León ha querido plasmar en estas páginas la cara más divertida del quehacer diario de la Benemérita. Encuentros con automovilistas, parturientas, frescos, despistados... 120 relatos breves y divertidos protagonizados por agentes de diferentes puntos de España.

¿Cómo empiezas a escribir sobre la Guardia Civil?

Fui Guardia Civil durante 14 años. En el 96 pasé a la situación de Retirado y empecé a pensar en contar un poco mi experiencia, acompañada de algunas anécdotas para que resultara más amena la lectura. Contaba también cómo fue mi lucha sindical desde Sindicato Unificado de la Guardia Civil cuando aun operaba en la clandestinidad. Así surgió ‘Diario de un Guardia Civil’ en 2003. Muchos compañeros empezaron a interesarse y a contarme sus propias historias y anécdotas y de todo ello nació mi segundo libro ‘Anecdotario de un Guardia Civil’ en 2008.

Pero seguían surgiendo anécdotas…

El producto se vendía bien, resultaba interesante, así que decidí seguir en la misma línea. En esta ocasión me he puesto en contacto con las diferentes delegaciones provinciales de la Asociación de Guardias Civiles y desde toda España, un montón de agentes en activo y retirados, me han ido mandando sus historias por correo electrónico.

Este libro presenta la cara más divertida de la Guardia Civil.

Si. Se trata de desmitificar un poco la imagen de ese cuerpo represivo de otra época. Recuerdo cuando yo era pequeño, con apenas 5 años saliendo del cine, mi hermano me empujó hacia un agente que estaba allí plantado con su capa y su tricornio. Rompí a llorar de miedo. Ahora por suerte la percepción ha cambiado. La Guardia Civil hace tiempo que es uno de los cuerpos mejor valorados.

¿Cuenta historias reales con nombres y apellidos?

Todas las historias son reales. No así los nombres y las localizaciones. Todos los compañeros me han pedido anonimato. Aún hay cierto miedo por estas cosas porque muchos siguen en activo. Así que para los nombres propios he usado los nombres de accidentes geográficos de La Rioja y Cantabria. En cuanto a los lugares, si la historia tiene lugar en Soria, yo pongo que ha sido en Valladolid.

¿Qué tipo de historias son las más frecuentes?

Sobre todo las que tienen que ver con automovilistas, controles de alcoholemia, excusas absurdas… También las relacionadas con el colectivo gitano, que por el propio carácter, suelen resultar muy divertidas. Ocurren cosas a veces muy curiosas, desde un anciano que llevaba a una oveja de copiloto, con cinturón de seguridad incluido, hasta un agente de aduanas que probó las cenizas de un muerto pensando que se trataba de algún tipo de droga.

“Relatos de la Guardia Civil”, de la editorial cántabra Tantín, se encuentra ya en las principales librerías de Logroño al precio de 10 euros. Esta tarde a las 20h su autor lo presentará en el Centro Cultural de Ibercaja, en Portales 42.