Los Objetivos de Desarrollo del Milenio en crisis

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La crisis podría dar al traste todos los avances conseguidos hasta ahora para alcanzar los Objetivos de Desarrollo del Milenio

En 1990 los países miembros de Naciones Unidas se comprometieron con ocho objetivos para hacer de este mundo un lugar mejor para todos y acabar con la pobreza. Ahora todas estas declaraciones de buena voluntad podrían quedarse en palabras debido a la actual situación económica.

Si la comunidad mundial responde de manera constructiva a la crisis, los objetivos todavía pueden lograrse. Para el Secretario General de la ONU, Ban Ki-moon el cumplimiento del compromiso de aumentar la ayuda es primordial, al igual que velar por que los intereses de los países en desarrollo y de los países más pobres.

En esta ocasión la ONU hace un llamamiento especial para luchar contra el cambio climático y llegar a un acuerdo que renueve el compromiso de todos los países de reducir sus emisiones de dióxido de carbono (CO2) en la cumbre de Copenhague prevista para diciembre.

El Secretario General de la ONU advierte que si dejamos de lado estos objetivos ''la viabilidad de nuestro planeta y el futuro de la humanidad están en juego''.

A tan sólo seis años para que se cumpla la fecha límite propuesta para alcanzar los objetivos acordados en la Declaración del Milenio, los gobiernos deben redoblar sus esfuerzos de cooperación y solidaridad, a pesar de la crisis.

Informe sobre los Objetivos de Desarrollo del Milenio 2009

El Informe, presentado hace unos días por el Secretario General de Naciones Unidas en Ginebra, pronostica que para 2009 entre 55 y 90 millones de personas estarán viviendo en condiciones de pobreza extrema.

La prevalencia del hambre en las regiones en desarrollo ha pasado de un 16 por ciento en el 2006 a un 17 por ciento en el 2008. La disminución de los precios internacionales de los alimentos en la segunda mitad del 2008 no ha conseguido que los alimentos sean más asequibles para la mayoría de la población del mundo.

En este drama las principales víctimas son las mujeres y los niños, la crisis ha provocado que los avances en materia de igualdad y empoderamiento de la mujer se estanquen y en algunos casos retrocedan.

El informe analiza uno a uno los objetivos que en 1990 los países de Naciones Unidas se marcaron para luchar contra la pobreza, la injusticia y la desigualdad. El documento se compone de ocho objetivos y varias metas a alcanzar antes de 2015.

Objetivo 1: Erradicar la pobreza extrema

El dossier concluye que la crisis económica mundial frena el progreso de reducción de la pobreza y destaca que los ingresos por exportaciones en los países en desarrollo disminuyeron en el último trimestre del 2008, con la caída de los precios de las materias primas y de las exportaciones en general.

Objetivo 2: Lograr la enseñanza primaria a nivel universal

Desde 1999 el número de niños no escolarizados en edad de cursar primaria ha disminuido en 33 millones. Sin embargo, en el año 2007, unos 72 millones de niños en el mundo no tuvieron acceso a la educación, casi la mitad de ellos vive en África subsahariana, y en Asia meridional.

En este sentido, la ONU considera que para cumplir el objetivo en 2015, es necesario que todos los niños en edad de cursar primaria tengan acceso a la educación en el 2009. En los últimos años se han logrado algunos progresos: en el 2007 cerca de 137 millones de niños asistieron por primera vez a clases, es decir, 7 millones más que en 1999.

Objetivo 3: Promover la igualdad de género y el empoderamiento de la mujer

El documento indica que todavía no se ha alcanzado la paridad de género en la enseñanza, pero también destaca que en las regiones en desarrollo 95 niñas estaban matriculadas en primaria por cada 100 niños, según los datos de 2007, en comparación con la cifra registrada en 1999 de 91 niñas por cada 100 niños.

También cabe destacar que en la enseñanza superior hay más mujeres matriculadas que hombres. No obstante, existen importantes disparidades entre regiones. El sesgo a favor de las mujeres es elevado en las regiones desarrolladas. Al contrario, en África subsahariana, Asia meridional y Oceanía un número mucho menor de mujeres que de hombres continúa sus estudios en la enseñanza superior.

Objetivo 4: Reducir la mortalidad infantil

El número de muertes de niños menores de cinco años ha disminuido a un ritmo constante en todo el mundo. En el 2007, la tasa de mortalidad de menores de cinco años era de 67 por cada 1.000 nacidos vivos, una mejora respecto a la cifra de 93 registrada en 1990. Pero algunos países de África subsahariana y Asia meridional siguen sin mostrar progresos significativos.

Objetivo 5: Mejorar la Salud Materna

El informe preparado por la ONU considera que hoy en día, el parto sin riesgo es principalmente un privilegio de los ricos, ya que los avances en esta materia no llegan a todas las zonas del mundo. Según el estudio, cada año 536.000 mujeres fallecen como resultado de complicaciones en el embarazo, el parto o después de éste; la mayoría de estas muertes tienen lugar en países en desarrollo.

Objetivo 6: Combatir el VIH/SIDA, el paludismo y otras enfermedades

En 2007 la tasa de contagios por VIH en el mundo disminuyó hasta 2,7 millones, tras alcanzar su punto más álgido en 1996. Esta tendencia positiva se debe principalmente a la reducción en el número anual de casos nuevos en algunos países de Asia, América Latina y África subsahariana. No obstante, las tasas de infección continúan aumentando en otras partes del mundo,especialmente en Europa del Este y Asia central.

El colectivo más afectado por esta pandemia son las mujeres que viven en zonas pobres -dos terceras partes de las personas que viven con VIH se encuentran en África subsahariana y la mayoría son mujeres-.

Objetivo 7: Garantizar la sostenibilidad del medio ambiente

Para cumplir este objetivo, la meta que se han marcado los países es incorporar los principios de desarrollo sostenible en las políticas y los programas nacionales e invertir la pérdida de recursos del medio ambiente. Aunque muchos estados se han puesto manos a la obra, muchos otros siguen de brazos cruzados.

En este sentido, la ONU advierte que las emisiones mundiales de dióxido de carbono continuaron su tendencia ascendente, alcanzando los 29 millones de toneladas métricas, lo cual representa un aumento de un 2,5% respecto al año anterior. Las emisiones per cápita siguen siendo las más

elevadas en las regiones desarrolladas. Mientras que África subsahariana registra el valor regional más bajo.

Para luchar contra el cambio climático, los expertos que han elaborado el informe recomiendan reducir la deforestación con el fin de detener las emisiones de gases de efecto invernadero.

El calentamiento global puede acabar con la pesca en muchas zonas del mundo que dependen de ella para sobrevivir. Dada la incertidumbre acerca de los efectos del cambio climático en los recursos y ecosistemas, el documento propone gestionar los recursos pesqueros con mayor precaución.

Como punto positivo, el informe destaca que el mundo está a punto de cumplir la meta del

acceso al agua potable, pero no se debe bajar la guardia ya que 884 millones de personas en el mundo todavía utilizan fuentes de agua no mejoradas para beber, cocinar, bañarse y otras tareas domésticas. De ellas, un 84% (746 millones de personas) vive en zonas rurales.

Objetivo 8: Fomentar una alianza mundial para el desarrollo

En el 2008, los desembolsos netos de asistencia oficial para el desarrollo (AOD) aumentaron un 10,2% hasta los 119.800 millones de dólares, la cifra más alta jamás registrada, que equivale a un 0,30% del ingreso nacional combinado de los países desarrollados. Pese a este dato, Naciones Unidas advierte que la ayuda económica para África está muy por debajo de la meta fijada para el 2010 durante la cumbre de Gleneagles celebrada en el 2005, cuando los miembros del G-8 proyectaron que la ayuda que habían comprometido, sumada a la de los demás donantes, duplicaría la AOD al África para el 2010.

En cuanto al desarrollo de nuevas tecnologías, el dossier apunta que los teléfonos móviles y los adelantos en la tecnología de las comunicaciones están abriendo oportunidades nuevas de desarrollo debido a su crecimiento imparable. Según las cifras presentadas en este informe, a finales del 2007, había más de 2 mil millones de suscripciones a teléfonos celulares móviles en los países en desarrollo, que equivalían a una tasa de penetración del 39%.

El PNUD trabaja en favor de que se cumplan los objetivos del milenio

El Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) se encarga de coordinar todos los esfuerzos para que estos objetivos se cumplan y ayuda a los países a establecer la capacidad institucional, las políticas y los programas necesarios para alcanzarlos.

No debemos olvidar que ''somos la primera generación que posee los recursos, el conocimiento y la capacidad para eliminar la pobreza'' concluye el documento.

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