Tony Blair, de vuelta para impulsar a los laboristas

Desde la pasada semana, se especulaba con la posibilidad de que el laborista Gordon Brown implicase a su antecesor en la actual ‘batalla’ electoral contra el conservador David Cameron. Las sospechas fueron finalmente confirmadas ayer, cuando Tony Blair compareció en su antigua circunscripción electoral de Sedgesfield (noreste de Inglaterra) con un discurso especialmente crítico frente a los ‘tories’ y su eslogan electoral: “Es el momento del cambio”.

Según afirman los diarios británicos The Daily Telegraph y The Guardian, la idea de Brown es que Blair realice varias intervenciones a medida que se acerca el día del voto. Sin embargo, por ahora se desconoce cuántos discursos dará el político laborista y cuáles serán los puntos sobre los que ponga especial énfasis.

Después de que Brown lograse, no sin dificultades, desbancar al ex mandatario y ocupar su lugar en Downing Street, las cosas no le han resultado nada fáciles a la cabeza del Ejecutivo de Reino Unido. En los últimos meses, los sondeos han mostrado un acelerado avance de su opositor David Cameron, que parece gozar cada vez de mayor popularidad entre los electores. Así, a Brown se le ha criticado especialmente su falta de carisma y su escaso carácter proactivo a la hora de tomar medidas frente a la crisis.

Estando así las cosas, Tony Blair reapareció en Trimdom Labour Club para dar un nuevo empujón a la campaña de su partido. El ex Primer Ministro se refirió a las dificultades que su país ha atravesado a causa de la crisis, halagando los esfuerzos de su colega Gordon Brown. “Hubo un reconocimiento inmediato de que era necesaria y urgente una acción decisiva. En el momento de peligro, el mundo actuó. Gran Bretaña actuó. La decisión de actuar requería experiencia, juicio y audacia. Requería liderazgo, y Gordon Brown lo tuvo”, dijo al respecto.

Más adelante, Blair se refirió también a los nuevos retos que el país afronta en la difícil coyuntura económica y al enfoque que a éstos dan los Conservadores. “‘Es el momento del cambio’ [en referencia al eslogan del partido de Cameron] requiere la pregunta ¿qué cambio exactamente?”, preguntaba en su discurso. El ex mandatario continuó diciendo sobre el programa electoral de sus opositores que “hay un puzle que se ha convertido en un problema, que constituye ahora una larga y dura pausa para pensar en qué se centran”.

Sin embargo, allí no terminaron sus críticas, que continuó profiriendo de forma ferviente a lo largo del discurso. Blair habló de la fuerte escora que, a su juicio, su partido opositor ha tomado a la derecha y atacó su política respecto a la Unión Europea y su falta de posicionamiento claro en las políticas nacionales, considerando que se preocupan más de “dónde está la opinión pública” que de “hacia dónde es necesario llevar al país”. En este sentido, Blair se mostró seguro al decir respecto a las propuestas de los ‘tories’ que “allá dónde mires, donde quieres encontrar certeza, sólo obtienes confusión” y reforzó la opción Laborista al afirmar que “en contraposición, los laboristas han elegido su camino. Lo tienen planeado”.

Para concluir, el que fuera morador de Downing Street hasta 2007 transmitió al electorado su propósito firme de que sea el Partido Laborista quien lidere los cambios en Reino Unido. “Quiero un futuro justo para todos. Y creo que un nuevo gobierno laborista puede traerlo”, remachó.