Tony Blair sobre Brown: “Nunca iba a funcionar”

Que un ex primer ministro publique sus memorias no es novedad. Pero que ese mismo ex primer ministro critique duramente la labor del que él mismo nombró como su sucesor y que diga de él que su “inteligencia emocional” es nula y que su mandato “nunca iba a funcionar”, sí que despierta cierto interés. Si el mismo ex primer ministro defiende en su libro la entrada en una de las guerras más cuestionadas de los últimos tiempos, la polémica está servida.

Es lo que ha ocurrido con The Journey, las memorias del que fuera premier británico durante 10 años (1997-2007), Tony Blair. El diario The Guardian ha publicado un extracto del libro, en el que Blair denuncia la deriva de Gordon Brown, su sucesor en el 10 de Downing Street y a la cabeza del Partido Laborista. Para Blair, el motivo de que su partido triunfara y se mantuviera tantos años en el poder fue que se presentó como un “nuevo laborismo”, pero con Brown esa identidad se perdió.

Aunque no niega que su sucesor tuviera ciertas capacidades políticas (“también era fuerte, capaz y brillante”, dice), Blair asegura que sabía que Brown sería un desastre político y que los laboristas no ganarían las elecciones de 2010. Como muestra de algunos de los fallos de su sucesor destaca la prohibición de la caza de zorros.

Otro de los puntos polémicos de sus memorias es la “apasionada defensa”, tal como lo califica The Guardian, de la guerra de Iraq. Se dice “angustiado” por no haber podido imaginar la “pesadilla” que iba a tener lugar como consecuencia de la guerra y lamenta la elevada cifra de muertes que se produjeron. Sin embargo, no se arrepiente de haber defendido la invasión. De igual manera apoya que continúe la ofensiva en Afganistán y muestra su preocupación por los planes nucleares de Irán.

El ex primer ministro aprovecha también la ocasión para hablar de los “errores” de Brown (quien un día fuera nombrado Ministro de Economía cediéndole de esa manera el liderazgo del partido a Blair) en materia económica. “El problema”, asegura, fue optar por “un paquete que combinara gasto público, una fuerte regulación, que apuntara a los bancos como los malhechores y tirara por la borda la reinvención de un gobierno a favor de la rehabilitación del gobierno. La gente entiende la diferencia entre un Estado forzado a intervenir para estabilizar el mercado u un gobierno pasado de moda como actor principal de la economía”.

Los beneficios que generen las memorias de Tony Blair, un libro de 700 páginas que le ha llevado tres años escribir al ex primer ministro laborista, serán destinados a la construcción de un centro de deportes para heridos de guerra.