La factura de las obras que hasta el momento ha ejecutado el Real Madrid para la construcción de los aparcamientos municipales junto al Santiago Bernabéu asciende a 17,4 millones de euros, según adelanta El Confidencial, que cita un informe elaborado para el club blanco por Acciona, empresa encargada de los trabajos.
Esta cifra es la que el club de Florentino Pérez podría reclamar al Ayuntamiento de Madrid por daños y perjuicios derivados de una posible anulación definitiva del contrato por la justicia, dato al que no se han añadido los costes de desmovilización, seguridad y desmantelamiento de la obra (3,5 millones), ni tampoco el alquiler de instalaciones, los salarios del personal o las extensiones de garantías (1,6 millones).
El informe citado por El Confidencial asegura que el parón en las obras al declarar el TSJM como ilegales los aparcamientos que se construían por concurso municpal también afectarán a la ampliación de la estación de Metro de la línea 10 Santiago Bernabéu, y que en principio era independiente a la construcción de los estacionamientos, ya que está sufragada por la Comunidad de Madrid. En este caso el Real Madrid calcula que va a sufrir un retraso de doce meses y un perjuicio económico de 2,6 millones de euros.
Sin embargo, el contrato de concesión del Ayuntamiento de Madrid con el club merengue indica que “la suspensión de las obras no dará derecho al contratista al abono de daños y perjuicios”, un escudo legal para el Gobierno de Almeida si el Real Madrid quisiera reclamar el pago de los importes antes mencionados.
El concurso para la construcción de dos aparcamientos junto al Santiago Bernabéu quedó anulado la semana pasada por el TSJM y tiene escasas posibilidades de salir adelante debido a la contundencia de la sentencia. Preveía un gasto total en los trabajos de construcción de 105,14 millones de euros, con la partida dedicada a los aparcamientos como la más importante. Horadar el suelo de la Castellana iba a salir por 43,28 millones y el de Padre Damián por 24,46 millones, a los que había que sumar 13,07 del túnel en su segunda planta. El coste de las instalaciones necesarias para el funcionamiento de todo el equipamiento se elevaba a los 15,64 millones.
Los trabajos para levantar la parte de Padre Damián no se pusieron en marcha y los de la parte de Castellana estaban muy poco avanzados cuando la justicia ordenó la paralización de las obras, que el Real Madrid seguía ejecutando pese a la primera sentencia en contra de un juzgado, llegada en la primavera de 2024. Los 17,4 millones calculados por el club blanco supondrían más de un tercio del coste de obra total para el aparcamiento de Castellana, el único que había arrancado tímidamente.
El Ayuntamiento de Madrid aseguró que los aparcamientos no iban a costar “ni un euro” a los madrileños porque el Real Madrid iba a sufragar todo el gasto de construcción a cambio de su explotación durante 40 años, a la que añadiría la explanada situada entre el Bernabéu y la Castellana, cuyo acceso se encuentra anulado casi totalmente por las vallas de obra, que no han sido retiradas.