Ramón Gómez, bajista del grupo Claim: “No esperábamos que con solo seis canciones pudiéramos llegar hasta aquí”

Claim es una banda de indie pop formada por Adrián Riquelme, Ramón Gómez, Gonzalo Magaña y Juandi Pascual. Este proyecto tuvo como resultado el primer EP, 'Barbados', que se lanzó en diciembre de 2015. Casi tres años después, sale a la venta el segundo disco del grupo murciano, 'Sofá Paraíso', en una presentación que tendrá lugar el próximo viernes 9 de noviembre a las 20:00 horas en la Sala Ámbito Cultural del Corte Inglés de Murcia. En esta entrevista, Ramón Gómez, que se encarga del bajo y los coros, cuenta cómo ha sido grabar este disco, lo difícil que es compaginar la vida privada con la profesional y su experiencia en Claim.

¿Cómo surgió la idea de conformar el grupo?

Este grupo nace de otra banda anterior que se llamaba Odry, en la que estábamos prácticamente los mismos y estuvimos unos 7 u 8 años en Valencia tocando con este grupo. Luego, con la crisis, nos tuvimos que ir todos a vivir fuera y con el paso del tiempo fuimos volviendo a Murcia y nos fuimos reunificando otra vez. Primero, empezó Adrián a montar un proyecto más propio, al que luego nos sumamos Gonzalo y yo. Además, buscamos a Juandi, que es el batería que no estaba con nosotros en el grupo anterior, ya que el otro miembro de Odry aún sigue en el extranjero viviendo.

¿Fue un proyecto que os resultó más difícil de lo que pensabais en un principio?

Después de Odry, en esta segunda etapa ya nos lo tomamos más en serio. Ya sabíamos lo que queríamos intentar conseguir y si volvíamos a ensayar, a sacrificar los fines de semana y a trabajar duro en un proyecto era con la intención de hacer algo serio y, sobre todo, que nos encantara. Queríamos intentar alcanzar cosas que no conseguimos con el primer grupo, que sí fue totalmente un proyecto para tocar y divertirse.

¿Esperabais el éxito que cosechasteis?

Sinceramente, no lo esperábamos porque primero sacamos el EP anterior, 'Barbados', que son seis canciones que nos han permitido estar trabajando y girando durante casi dos años. Nos ha llevado a firmar un contrato editorial con Warner y firmar un management con la oficina 'Son Buenos'. No esperábamos que con solo seis canciones pudiéramos llegar donde hemos llegado, pero teníamos mucha fe en que, si hacíamos canciones bien hechas y que nos gustaran a nosotros, la cosa al final iba a salir. Y al final mira, la cosa está dando resultado.

¿Cómo componéis y os inspiráis?

El que siempre arranca las canciones es Adrián, que normalmente empieza con una letra y una melodía de guitarra. Ahora, además, utiliza un iPad y puede añadir a las canciones baterías, arreglos y algunas cosas más. Una vez que él tiene una idea más o menos clara, nos la pasa a los demás y nosotros vamos desarrollando sobre ella la línea de nuestros propios instrumentos, siempre aportando cosas. Asimismo, nosotros hacemos muchos fines de semana compositivos, es decir, nos encerramos en una casa y tocamos muchas veces una canción hasta ver si esta funciona.

¿Cómo ha sido la producción del nuevo disco?

Es un disco que ha tardado en grabarse más de un año, aunque toda la traca final la hemos hecho este verano.

¿Cómo creéis que van a reaccionar vuestros fans cuando escuchen los nuevos temas?

Tenemos muchas ganas de que llegue el viernes y que lo escuchen. La gente que ya ha oído los temas dice que seguimos siendo nosotros totalmente, pero que le hemos metido un punto más roquero, americano y electrónico al disco. El EP anterior era mucho más orgánico, más acústico, y este, después de haber hecho 40 o 50 conciertos, nos hemos dado cuenta de lo que también queremos vivir en directo.

En 2018 habéis tenido una gira muy completa, con conciertos en varias ciudades, ¿Tenéis pensado hacer una gira también en 2019?

Por suerte, hemos ganado el concurso 'Girando por salas', donde nos han seleccionado entre 700 bandas o algo así, y la verdad es que eso nos va a permitir ir a sitios de España a los que no hemos podido ir aún. La idea es que 2019 sea un año de no parar de tocar.

¿Cómo es compaginar la vida privada con la profesional?

Es muy duro, sobre todo porque el grupo no nos da de comer. Ahora mismo Adrián y yo, por ejemplo, estamos en el mismo estudio de arquitectura trabajando y tres de nosotros somos arquitectos, por eso trabajamos mucho juntos. Y bueno, cada vez el estudio va mejor y el grupo va bien, así que al final yo creo que es duro, pero si te gusta lo que haces y estás emocionado con eso, también lo disfrutas mucho.