Anguita apoya el derecho de autodeterminación pero admite que habría que reformar la Constitución

El excoordinador general de IU Julio Anguita ha mostrado este viernes su apoyo al derecho de autodeterminación, pero ha reconocido que éste no cabe en la actual Constitución, así que ha apostado por una reforma de la Carta Magna en la que “el pueblo español” reconozca el derecho de autodeterminación y “a partir de ahí el pueblo catalán, el vasco o el gallego pongan en marcha ese principio constitucional”.

“El pueblo español le da con su soberanía al pueblo catalán o vasco su capacidad de decidir. Eso se llama un cambio constitucional y así no hay ruptura”, ha dicho en una entrevista en RNE recogida por Europa Press con motivo de la publicación de su libro 'Contra la Ceguera'.

Anguita ha defendido que su propuesta es coherente con el Derecho Internacional y también con la Constitución española porque, a su juicio, la propia Constitución reconoce que no todas las comunidades autónomas son iguales desde el momento en que distingue “regiones” y “nacionalidades”, un término que “montones de catedráticos de Derecho Constitucional dicen que quiere decir nación”.

De este modo, cree que para afrontar la actual tensión soberanista que se vive en Cataluña, hay que hacerlo con “la legalidad” y afrontar “el tema del derecho (de autodeterminación) con claridad”, cosa que a su juicio “no se está haciendo”. Eso sí, ha reconocido que también cabe no creer en el derecho de autodeterminación.

Pero también ha reclamado que se explique a quienes quieren la independencia que el nacionalismo catalán es de origen burgués y “proteccionista”, que “ha querido un Estado propio en la medida en que se defendieran los intereses de sus fábricas” y se ha envuelto en una bandera para reclamar “ventajas de clase”.

Por eso, ha preguntado si la política económica de una Cataluña independiente sería “una copia” de la del Gobierno de Mariano Rajoy, que a su juicio es lo que está haciendo el presidente de la Generalitat, Artur Mas.

Y, preguntado si él considera que España puede ser divisible, ha replicado que para él España son “los españoles”, no una “entidad abstracta” y ha optado por acusar al Gobierno y al Ejército de hacer un “papelón” en el Sáhara Occidental en 1977, “abandonando miserablemente a un trozo de la España tan querida”.

También ha recordado que IU fue la primera formación en hacer una propuesta federal para España, teniendo en cuenta además que políticas como la exterior y la Seguridad Social deben ser competencias centrales. Según ha relatado, la respuesta Josep Lluis Carod Rovira y José Antonio Ardanza fue “esto está muy bien, pero es que nosotros somos independentistas”.

Anguita desconoce que ha hecho la actual IU con esa propuesta federalista y también ha dejado claro que no interfiere en la actual dirección, que se limita a dar su opinión “las pocas veces” que se la piden y que agradece que sean pocas. Ni siquiera irá al Congreso del Partido Comunista de España (PCE) que se celebra este fin de semana.

“¿DÓNDE ESTÁ LA PINZA?”

Por otro lado, ha negado que existiese la famosa 'pinza' de IU con el PP contra el PSOE, argumentando que sólo votaron juntos una vez y que se negó a aceptar la oferta por escrito de José María Aznar para hacer una moción de censura contra Felipe González. “¿Dónde está la pinza?” se ha preguntado, tildando la expresión de “invento que fue muy bueno para las mentes perezosas”, porque pintaba un panorama donde había “un bueno, el PSOE; un malo, el PP y un traidor, IU”.

No ha querido, en cambio, pronunciarse sobre si tiene que abdicar el Rey, porque cree que eso es “un problema de la Monarquía” y que el republicanismo no debe definirse en función de un “ataque permanente” a la institución. “No defiendo al Rey, que no goza de mis simpatías, sino de mis más aceradas críticas, pero no me gusta perder el tiempo en esas cosas porque creo que la República es un contenido concreto alternativo en muchas políticas”, ha dicho.

Anguita ha defendido que la política debe basarse en pensar y estudiar, y que hoy en día aprecia una “gran superficialidad” y demasiado empeño en buscar “una frase ingeniosa” para generar apego de los votantes. Por eso, ha elogiado a representantes de su partido como Alberto Garzón o Cayo Lara, porque “estudian”, y, de otros partidos, al exministro socialista Ramón Jáuregui porque, aunque no comparte su discurso, reconoce que “lo articula”.