Borrell se reúne con el canciller chino antes de la segunda cumbre de la Seda

El ministro español de Asuntos Exteriores, Josep Borrell, mantuvo hoy una reunión con su homólogo chino, Wang Yi, en vísperas del arranque del segundo Foro internacional sobre las Nuevas Rutas de la Seda, también llamado “Iniciativa de la Franja y la Ruta” y que se inaugurará mañana viernes en Pekín.

La cumbre reunirá este año a representantes de hasta 150 países y organizaciones internacionales en el marco del multimillonario proyecto de inversiones promovido por el presidente chino, Xi Jinping, desde 2013.

Aunque en principio estaba prevista la asistencia del presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, la proximidad de la fecha de las elecciones generales en España -el 28 de abril- mitivó que finalmente sea Borrell quien participe en el evento.

Durante su reunión con el canciller chino, Borrell expresó su “asombro” ante la transformación experimentada por el país asiático en los últimos años, asegurando que “nadie en el mundo ha hecho tanto en tan poco tiempo”.

Wang, por su parte, señaló que China considera a España un “importante socio de cooperación” en lo referente a la implantación del proyecto de la Franja y la Ruta.

Uno de los principales asuntos de la agenda bilateral es el déficit comercial de Madrid con Pekín, que el año pasado ascendió un 6,3 %, hasta alcanzar los 20.700 millones de euros.

El ministro Borrell también mantuvo esta tarde un encuentro con representantes de las principales empresas españolas radicadas en el país asiático, entre ellas Telefónica, Inditex, Mapfre e Indra, para conocer la situación de sus negocios y su percepción de la realidad china.

Esta segunda cumbre se inaugurará en medio de los recelos que esta iniciativa ha despertado en Estados Unidos y en algunos socios de la Unión Europea: mientras algunos países, como Italia, Grecia y Portugal, han decidido participar, Alemania y Francia -con apoyo de Bruselas- tratan de encabezar una respuesta unificada.

En este sentido, el ministro de Finanzas chino, Liu Kun, aseguró hoy durante la celebración de un panel económico que se establecerá un mecanismo para “prevenir y resolver” eventuales crisis de endeudamiento, uno de los principales focos de fricción con respecto a este proyecto.

China asegura que ha realizado una inversión directa en los países participantes de 90.000 millones de yuanes (13.387 millones de dólares, 11.936 millones de euros) entre el momento de la formulación de la iniciativa en 2013 y el cierre de 2018.

España, por su parte, no se ha adherido de forma oficial a esta iniciativa, pero sí ha trabajado con China en algunos proyectos asociados a la misma, como el tren de mercancías que conecta la ciudad china de Yiwu con Madrid.

En una entrevista al diario hongkonés “South China Morning Post” antes de su visita, Borrell afirmó que España “desea acompañar el proceso de mejora” de las Nuevas Rutas de la Seda, respetando la “libertad y soberanía” del resto de países.

Pero advirtió de que, en cualquier caso, deben cumplirse los principios de sostenibilidad financiera, laboral y medioambiental que la Unión Europea considera “esenciales”, para que no resulte una “imposición” a los países más vulnerables.