Has elegido la edición de . Verás las noticias de esta portada en el módulo de ediciones locales de la home de elDiario.es.
Noticia de agencia

Noticia servida automáticamente por la Agencia EFE

Esta información es un teletipo de la Agencia EFE y se publica en nuestra web de manera automática como parte del servicio que nos ofrece esta agencia de noticias. No ha sido editado ni titulado por un periodista de eldiario.es.

ONU: “Bangladesh salvó la vida de 607.000 rohinyás y ahora hay que ayudarle”

ONU: "Bangladesh salvó la vida de 607.000 rohinyás y ahora hay que ayudarle

EFE

Ginebra —

0

Bangladesh “literalmente salvó la vida” de los 607.000 rohinyás huidos desde el estado birmano de Rakáin desde el 25 de agosto al aceptar que entrasen en su territorio, y el resto del mundo debe ahora ayudarle de manera sostenida y no perder interés en esta crisis, pidió hoy un alto responsable de la ONU.

El alto comisionado adjunto para los Refugiados y responsable de su protección, Volker Türk, dijo -tras visitar los campamentos donde los rohinyás viven hacinados y en medio de la insalubridad- que no debe esperarse que esta situación se resuelva rápidamente.

La comunidad rohinyá de Birmania, una minoría musulmana, sufre la mayor crisis de refugiados desde la que protagonizaron los sirios, especialmente en los primeros años de la guerra civil en el país árabe que estalló en 2011.

En el mismo viaje Türk visitó Naypyidaw, la capital birmana, donde se entrevistó con tres ministros y un alto asesor de seguridad del Ejecutivo, pero no mantuvo encuentros con miembros del Ejército, que mantiene una decisiva cuota de poder en los asuntos del Gobierno.

Esta crisis se originó a finales del pasado agosto por el ataque de un grupo insurgente rohinyá contra dependencias policiales, lo que fue utilizado para justificar una gran ofensiva militar contra esta comunidad, que se afirma había sido preparada con anticipación.

Türk dijo hoy en una rueda de prensa en Ginebra que en esa operación militar se destruyeron “trescientas aldeas”, de las cuales muchas fueron totalmente quemadas, provocando la huida de sus habitantes hacia Bangladesh.

Este nuevo episodio de violencia contra los rohinyás -con otros similares que ocurrieron en los años setenta, a principios de los noventa y uno más limitado en octubre de 2016- ha provocado que haya ahora casi tres veces más rohinyás en Bangladesh que en Birmania.

Esta comunidad estaba concentrada en el estado birmano de Rakáin (noroeste), donde vivía en condiciones de completa discriminación, sin nacionalidad y con el movimiento restringido, ya que no podían salir de sus pueblos sin permiso de las autoridades.

Según las estimaciones que maneja la ONU, en el norte de Rakáin quedarían unos 150.000 rohinyás y alrededor de 200.000 en la zona central del mismo estado.

En Bangladesh, además de los 607.000 refugiados por la crisis actual, hay otros 300.000 que ya vivían en campamentos. Se suman a ellos unos 100.000 que se encuentran en Malasia y algunas decenas de miles en Tailandia, como resultado de crisis anteriores, lo que revela la dimensión regional de esta crisis.

Türk dijo que a pesar de sus peticiones, el Gobierno birmano todavía no autoriza a su representante en el país a viajar a Rakáin, donde tiene a tres empleados internacionales a los que no se les permite desplazarse.

De sus intercambios con las autoridades birmanas, Türk sostuvo que salió con la “fuerte impresión” de que están dispuestas a “validar” las recomendaciones que, casi coincidiendo con el inicio de esta crisis, presentó una comisión internacional creada para proponer soluciones al problema de los rohinyás.

Sus propuestas se centraban en reconocerles la nacionalidad birmana, garantizarles sus derechos elementales, resolver la situación de los desplazados o refugiados, e indemnizarles si han sido privados de sus tierras.

Sin embargo, el representante de ACNUR reconoció que es imposible predecir si todo ello realmente ocurrirá.

Confirmó que Birmania y Bangladesh han entablado un diálogo sobre un posible retorno de los refugiados, pero enfatizó que éste sólo puede ser voluntario y en condiciones seguras y dignas.

La ONU está convencida de que hay que mantener la presión sobre el Gobierno birmano porque, de otra manera, su responsabilidad se diluirá y los rohinyás podrían quedarse indefinidamente en Bangladesh.

ACNUR cree que, a pesar del traumatismo sufrido, al menos la mitad de los refugiados rohinyás desean retornar adonde vivían.

De los refugiados rohinyás, el 54 % son menores de 18 años y el 3 % son niños solos, un 14 % de mujeres están solas con sus hijos y el 30 % sufren de una gran vulnerabilidad por padecer alguna enfermedad grave o discapacidad.

En medio de estas condiciones, Unicef dijo hoy que se ha detectado un brote de sarampión, con más de 400 casos sospechosos, por lo que está acelerando una campaña de inmunización que ya empezó la semana pasada y que incluye la rubeola.

Etiquetas
stats