Sànchez (ANC) augura una victoria independentista y avisa de que la cárcel no le frenará

Lo ha hecho en una carta publicada este martes en el diario 'Ara' y escrita hace una semana desde la cárcel de Soto del Real, en la que ingresó el 16 de octubre.

Para Sànchez, “la próxima partida se juega el día 21, una convocatoria extraña pero que debe incomodar” y que debe aprovecharse para afianzar la victoria de los independentistas en las últimas elecciones.

“Las urnas son el terreno de juego más favorable para demostrar que los partidarios de la República Catalana somos mayoría”, añade, y se muestra convencido de que los partidarios del artículo 155 de la Constitución perderán.

Augura que el PP, el PSC y Cs “quedarán lejos de los 68 escaños y muy por debajo del voto partidario de la independencia”, y que no tendrán más remedio que felicitar a las fuerzas soberanistas al ver los resultados.

“El precio que pagarán Rajoy, Sánchez y Rivera serán los resultados favorables al independentismo en unas elecciones convocadas por ellos y con toda Europa y una parte del mundo pendiente de los resultados”, señala.

Dice que el Gobierno central ha sido muy hábil al convocar elecciones rápidamente, pero considera que lo ha hecho para “deshacerse del 155 en el mínimo tiempo posible ante el miedo de que su implantación se convirtiera en un Vietnam particular”.

“Hemos tenido, democráticamente hablando, al Estado contra las cuerdas, pero el Estado es fuerte y, quizás por algún error nuestro --no somos perfectos-- ahora nos ha situado en unas nuevas coordenadas que quizás algunos no esperaban tan pronto”, destaca, y también apunta que las elecciones se podrían haber convocado desde la Generalitat.

Sànchez agradece el apoyo que está recibiendo y llama a mantener la movilización ciudadana y la acción institucional desde el Govern, el Parlament y los ayuntamientos: “Movilización ciudadana y representación democrática, calle e instituciones”.

DEFIENDE QUE ES LIBRE

Destaca que por mucho que le encarcelen se siente libre porque nadie puede prohibir sus ideas, y dice que seguirá trabajando para que “Cataluña encuentre democráticamente la libertad”.

“No hay cárcel, carcelero, cerrojo ni decisión judicial que pueda, si nosotros no queremos, privarnos de ser como somos, de pensar como pensamos y de querer a la gente que queremos”, subraya.

Defiende que no ha cometido ningún delito pero asume la cárcel porque “ya se sabe que, para determinadas cosas, el Estado español no hila fino”.