Budapest dice que eliminará dudas sobre polémicas enmiendas constitucionales

El primer ministro húngaro, Viktor Orbán, aseguró hoy al presidente de la Comisión Europea (CE), José Manuel Durao Barroso, que su Gobierno está dispuesto a cooperar “para eliminar las preocupaciones” sobre unas polémicas enmiendas constitucionales aprobadas hace dos semanas.

En una carta enviada esta tarde a Barroso y publicada en la página web de la presidencia del Gobierno, Orbán afirma que Budapest “cooperará en todo para eliminar las dudas” expresadas por la CE.

Aludió y respondió así a la misiva que recibió este viernes del presidente del Ejecutivo comunitario, en la que se reiteran las “serias preocupaciones” de Bruselas sobre la reforma constitucional llevada a cabo en Hungría.

En su carta, Barroso pidió a Orbán y su Gobierno que atiendan esas preocupaciones “y las remedien de forma determinada y sin ambigüedades”.

Orbán asegura en su respuesta que ha iniciado “los pasos legislativos con los que se podrán tratar las preocupaciones señaladas” por la Comisión, sin precisar en qué consisten dichos pasos.

El primer análisis jurídico que ha hecho la CE de la nueva Constitución húngara confirma sus dudas sobre la compatibilidad de la cuarta enmienda con las normas europeas y el principio del Estado de derecho.

Barroso explicó que una vez que se finalice el análisis jurídico en curso, la Comisión tomará “los pasos necesarios para en su caso iniciar los procesos de infracción”.

El próximo miércoles, la Eurocámara acogerá un debate sobre la situación constitucional en Hungría.

La polémica reforma impulsada por el conservador Orbán, cuyo partido Fidesz cuenta con una mayoría superior a los dos tercios en el Parlamento, ha sido duramente criticada dentro y fuera del país por limitar supuestamente la democracia en el país centroeuropeo.