Más de 11.000 desplazados por combates contra yihadistas en el sur de Filipinas

Unas 11.170 personas se han visto obligadas a abandonar sus casas en la isla de Mindanao, al sur de Filipinas, debido a los nuevos combates entre el Ejército y el Grupo Maute, afín al Estado Islámico (EI) y responsable de la ocupación el año pasado de la ciudad de Marawi.

La ofensiva, que empezó el domingo, se ha recrudecido en las últimas 24 horas, lo que ha duplicado el número de población desplazada, que supera ya las 2.200 familias, informó hoy el Consejo de Gestión de la Reducción del Riesgo de Desastres de la provincia de Lanao del Sur.

Desde el domingo han sido abatidos cinco presuntos yihadistas en estos ataques que tienen como objetivo capturar al cabecilla del Grupo Maute, Abu Dar, conocido como el “emir” del EI en el Sudeste Asiático, indicó a medios locales el coronel Romeo Brawner, portavoz de la Primera División de Infantería que opera en el área.

Según las informaciones de la inteligencia militar, Abu Dar se encuentra en ese enclave montañoso de Lanao del Sur, entre las ciudades de Pagayawan y Tubaran, y lo consideran uno de los líderes del asedio durante cinco meses de Marawi.

Los yihadistas del Grupo Maute irrumpieron en mayo de 2017 en la ciudad de Marawi, capital de Lanao del Sur, lo que desembocó en un conflicto armado que duró cinco meses y causó la muerte de 920 insurgentes, 165 soldados y 47 civiles, además de unos 360.000 desplazados.

Los insurgentes, que enarbolaron banderas negras del EI, contaron, según información de inteligencia, con abundantes recursos y tiempo para planear el que ha sido el mayor conflicto armado de las últimas décadas en Filipinas.

Debido a ese conflicto, el presidente filipino, Rodrigo Duterte, declaró la ley marcial en toda la región de Mindanao -donde viven unos 20 millones de personas-, una medida de excepción que se prolongará también todo el 2018.

Con cerca de un 20 por ciento de población musulmana, Mindanao ha sido escenario desde hace décadas de conflictos entre el Gobierno y diversos grupos extremistas, entre ellos la organización yihadista Abu Sayaf, también adscrita al EI.