El diputado del PP Alberto Casero ha pedido este viernes la suspensión de militancia de su partido después de que el Tribunal Supremo haya ordenado la apertura de juicio oral contra él, según han asegurado fuentes de la dirección. De momento, Casero mantendrá su escaño, aunque fuera del Grupo Popular, según las mismas fuentes. Oficialmente, el PP se limita a responder: “Nada que decir”.
Casero, cuyo nombre se hizo conocido por su error en la votación de la reforma laboral, está así a un paso de ser juzgado por prevaricación y malversación de caudales públicos. El juez del Tribunal Supremo que ha investigado su caso ha decidido procesarle por delitos de malversación y prevaricación por cinco contratos supuestamente irregulares adjudicados por el Ayuntamiento de Trujillo cuando él era alcalde de la localidad extremeña, entre 2017 y 2018.
Ahora la Fiscalía tiene que fijar su posición. Casero también podrá recurrir la decisión ante el propio Supremo.
Informa Aitor Riveiro.