La respuesta del futbolista Aitor Ruibal tras un grito homófobo: “Me pasa en todos los partidos”

Termina el partido en el Estadio de Vallecas. 0-0. Ni el Rayo ni el Betis han conseguido hacerse con los tres puntos. Es el turno de los futbolistas para atender a los micrófonos de La Liga. Tras este partido le toca a Aitor Ruibal, jugador del equipo andaluz. Cuando comienza a hablar se oye en un estadio ya vacío “píntate las uñas” desde la grada. Tras un segundo en que duda si responde, simplemente le devuelve el grito: “ale, homófobo”.

“Me pasa en todos los partidos”, explica Ruibal a continuación, lamentando esta situación. “No pasa nada, no hay que hacer bola”, le explica a la periodista que dice no haber escuchado lo que le habían gritado.

El de Ruibal es el enésimo episodio en el que unas gradas retrógradas no entienden las actitudes de futbolistas con una masculinidad no hegemónica. Tampoco es la primera vez que le ocurre a este futbolista, quien en distintas ocasiones ha aparecido, en efecto, con las uñas pintadas.

En 2023, varios futbolistas acudieron a la boda de un compañero de equipo, Camarasa. Las redes se llenaron de comentarios de mal gusto tanto contra Ruibal como contra Borja Iglesias, hoy en el Celta y entonces en el Betis. En aquella ocasión el 'problema' para ese público homófobo fue que llevaban bolso.

Ya en aquella ocasión Ruibal decidió alzar la voz. Acusó a una “minoría ruidosa” de ridiculizarle a él y a Iglesias. “Debemos mantener el respeto hacia cualquier persona, con independencia de su orientación sexual o de cualquier índole”, apuntó. “Hay que condenar la homofobia que, evidentemente, sigue existiendo en mayor o menor medida”, zanjó.

Precisamente, Iglesias ya fue el foco de los insultos cuando apareció en un entrenamiento del Betis con las uñas pintadas, lo que ahora le gritan a Ruibal. “Maricones en mi equipo no, gracias”, “qué grima”, “rescisión de contrato y que se vaya al Sevilla”; estos fueron algunos de los mensajes que recibió Iglesias entonces.