El arco de la Macarena y el Callejón del Agua se incorporan al contrato municipal de conservación permanente

Un total de 11 bienes patrimoniales de la ciudad de Sevilla se han sumado al listado de los protegibles que figuran en el contrato de conservación permanente de la Gerencia de Urbanismo. De esta forma, se amplía la lista de 14 a 25 elementos históricos que se encuentran en las calles y plazas de la ciudad sin que formen parte de ningún edificio o servicio municipal. Entre las nuevas incorporaciones, destacan enclaves tan singulares de la ciudad como el arco de la Macarena, la muralla del Callejón del Agua o la calzada romana de la avenida de Roma que, hasta ahora, eran objeto de intervenciones de mantenimiento extraordinarias, no estando amparados por el servicio de atención continua que garantiza este servicio, desde que dicha Gerencia asumió en 2014 las competencias de conservación, mantenimiento y custodia de estos bienes patrimoniales que están a la intemperie.

Este ha sido uno de los principales acuerdos adoptados durante el Consejo de la Gerencia de Urbanismo y Medio Ambiente celebrado la mañana de este miércoles, tal y como lo ha subrayado el delegado del ramo, Juan de la Rosa, en una atención a medios posterior. Durante su intervención, De la Rosa ha explicado que, habiendo “expirado el contrato que la Gerencia de Urbanismo celebra periódicamente para garantizar la conservación y el buen estado” de este tipo de elementos históricos que forman parte del patrimonio de la ciudad, “se ha iniciado el proceso para una nueva contratación”, contando con un presupuesto de 280.000 euros euros durante un plazo de ejecución de dos años.

De acuerdo con el gerente del organismo responsable de urbanismo en la ciudad, Fernando Vázquez, este contrato funciona como “una herramienta” para llevar a cabo “una conservación continua” de aquellos bienes patrimoniales que lo requieren por su sobreexposición a la intemperie o a usos indebidos. Así pues, el criterio que se esgrime desde la Gerencia de Urbanismo para la inclusión de esos 11 nuevos enclaves es, precisamente, “impedir que se produzcan importantes degradaciones en monumentos que están a la mano”. Además, al estar contemplados dentro de una partida presupuestaria específica para esa atención continua, se garantiza un seguimiento en el cuidado de aquellos que se han restaurado recientemente, como es el caso del arco de la Macarena.

Listado de las nuevas incorporaciones

Con la contratación de este servicio, según Fernando Vázquez, se evita tener que desembolsar grandes inversiones para reparar daños que pueden sufragarse con un mantenimiento continuado. “No vamos esperar a que dentro de 10 años tengamos que hacer otro esfuerzo importante”, ha apostillado el gerente de Urbanismo en alusión al ejemplo del arco de la Macarena. En este mismo sentido, desde el Gobierno local se defiende que “por su capacidad de protección, las actuaciones que se realizan con cargo a este contrato juegan un papel fundamental en el cuidado de estos bienes, en la medida en que previenen daños y deterioros que obliguen más tarde a complejas intervenciones de restauración”.

En este contexto, se produce la nueva incorporación, como resultado de la aprobación en 2022 del Plan Director del Patrimonio Histórico Inmueble Municipal, en el que se contempla el siguiente listado de 11 bienes patrimoniales:

Listado anterior

Con este contrato que se lleva renovando desde el año 2014, se ejecutan “las obras y trabajos necesarios para llevar a cabo su mantenimiento por daños derivados de su sobreexposición a la intemperie (contaminación atmosférica, ataques biológicos…), o desperfectos causados por actos vandálicos y usos indebidos”. En palabras del delegado de Urbanismo, la partida dedicada a este fin permite “disponer de los recursos técnicos y humanos necesarios para atender cualquier circunstancia que afecte a la conservación y el mantenimiento” de este listado de elementos históricos, inicialmente formado por los 14 siguientes:

En definitiva, como remarcan desde Urbanismo, “se trata de devolver al monumento sus valores estéticos, artísticos y patrimoniales e impedir que los daños se conviertan en patologías más graves”, mediante un servicio que garantice la atención continua.