La presidenta de la Comunidad de Madrid, Cristina Cifuentes, vive horas imposibles después de que Ok Diario publicase un vídeo en la que se le ve abonando a un guardia de seguridad de un supermercado de Vallecas dos botes de crema que este había descubierto en su bolsa. Nadie de su equipo ha salido a dar explicaciones mientras en la Puerta del Sol, la sede de su Gobierno, crece la sensación de una dimisión inminente.