Francia ha registrado 73.000 contagios de COVID en las últimas 24 horas, un 15% más que hace una semana y de los que el 20% están atribuidos a la variante ómicron, según ha anunciado este martes el portavoz del Ejecutivo, Gabriel Attal.
En una comparecencia ante la prensa, Attal ha pedido “reducir los contactos” en las fiestas navidades y ha avisado de que se podrán tomar “otras medidas si la situación sanitaria se degrada”, sin especificar cuáles. Attal ha atribuido a los jóvenes de entre 20 y 40 años la responsabilidad de “ser los que más están propagando” el virus en esta nueva oleada.
Por otro lado, el Gobierno francés espera aprobar en el Parlamento durante enero la ley anti-COVID, que entre otras cosas hará obligatoria la vacuna para poder obtener el pasaporte sanitario que permite en el país entrar a la restauración o a determinados eventos culturales y museos.
A través de EFE.