El mínimo exento del impuesto de sucesiones y donaciones se elevará a los 250.000 euros desde 2017
El impuesto de sucesiones y donaciones en Andalucía experimentará un importante cambio: el mínimo exento para herencias de parientes directos se elevará de 175.000 a 250.000 euros desde el 1 de enero de 2017, mientras que otras bonificaciones para el caso de las explotaciones agrícolas entrarán en vigor este mismo año y ni siquiera será necesario el parentesco, sino que servirá, por ejemplo, haber trabajado la propiedad más de cinco años. Lo han acordado el PSOE-A y C's en el grupo de trabajo constituido el pasado año para introducir cambios en este tributo. Rubrican así una de las exigencias de los de Albert Rivera para aprobar los presupuestos autonómicos de 2016.
El PSOE-A le ha permitido a C's que haga el anuncio este viernes, en plena campaña de las elecciones generales del 26 de junio. Lo ha desvelado en Jaén el portavoz parlamentario de dicha formación, Juan Marín, quien ha celebrado este pacto entre los dos grupos parlamentarios, para lo que había dado un ultimátum a los socialistas hasta el 30 de junio. “C's hace historia en materia fiscal en Andalucía (...) porque es la primera vez que se cambia en 35 años”, ha enfatizado.
De hecho, poco después lo celebraba desde su campaña en Cádiz la presidenta de Andalucía, Susana Díaz, quien destacaba haber cumplido su palabra con esta decisión, que ha definido como “un balón de oxígeno para los trabajadores y las clases medias”. La presidenta ha insistido en que “los tres compromisos en materia fiscal” que tenía los podrá cumplir: primero por la bajada del tramo autonómicos del IRPF, en vigor con los presupuestos autonómicos de este año; segundo, la devolución también en 2016 del impuesto de hidrocarburos para transportistas; y tercero, este tributo. “Prácticamente el 99% de las explotaciones agrarias en Andalucía quedarán exentas”, ha apostillado.
Para 2017
Como contrapartida, C's tendrá que esperar a 2017 para que este cambio entre en vigor, pese a que lo había exigido para 2016, mientras que desde el PSOE-A le insistían en las dificultades por la tajada que puede suponer en los ingresos previstos en el ejercicio. De hecho, C's quería que el mínimo exento se fijara en 350.000 euros, pero finalmente ha valorado la postura del PSOE-A de no llegar hasta lo que los socialistas consideran ya herencias para ricos. “Entiendo que para ellos hay una cuestión de ideología importante”, ha reconocido Juan Marín.
Se da la circunstancia de que en el último pleno el PP-A elevó por tercera vez una proposición de ley para reducir hasta prácticamente su eliminación este impuesto, si bien el PSOE-A logró evitar que se le impusiera la medida porque votó con Podemos e IU en contra, mientras que C's no tuvo más remedio que respaldar a los populares, dado que comparten los criterios en contra de este tributo. En todo caso, el PSOE-A estaba tranquilo por contar con el respaldo de la izquierda para evitar este envite de la derecha.
Para ilustrar lo que supondrá incrementar el mínimo exento, Juan Marín ha puesto el ejemplo de dos hijos que heredan bienes por un máximo de 500.000 euros, que desde el 1 de enero del próximo año no tendrán que pagar nada, mientras que en estos momentos cada uno de los herederos tiene que abonar 38.875 euros. Mientras, la reducción para el caso de las explotaciones agrícolas ya había sido pactada por las dos formaciones en el grupo de trabajo hace tres meses y con el compromiso de que se aplicara desde este año.
Este pacto deja a los populares sin uno de sus principales caballos de batalla contra el PSOE-A y para marcar distancias también con C's, toda vez que en los últimos meses había emprendido una campaña de recogida de firmas -había reunido más de 300.000- para exigir su eliminación. Recientemente el presidente del PP-A, Juan Manuel Moreno, retó a Susana Díaz a modificarlo sin esperar a que comenzar la campaña del 26J, si bien finalmente se ha anunciado con la misma en marcha. Pero Juan Marín no ha dejado pasar la ocasión de criticar este viernes a los populares por su campaña en contra de la “mesa de camilla”, que es como el PP-A había calificado a este grupo de trabajo. “Hemos demostrado que los grupos de trabajo sirven”.
