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Las europeas en Andalucía o una primera vuelta de unas posibles autonómicas anticipadas

Susana Díaz y Juan Manuel Moreno se batirán en las urnas por primera vez, pero ¿cuándo?

Olga Granado

La precampaña para las elecciones europeas ha comenzado en Andalucía con una cuestión de fondo que la diferencia de la convocatoria en el resto del país, y es la posibilidad de que las autonómicas se adelanten y no se complete la legislatura (2016), lo que de momento no deja de ser una hipótesis que desde hace meses va variando de intensidad.

El PP-A, oficialmente, dado que no todos en el partido lo ven tan claro, lo da por seguro y fija otoño de 2014 como el momento en el que se producirá; el PSOE-A lo niega, también oficialmente, pero sin atreverse a jurarlo; e IU intenta enfriar este debate convencida de que no le conviene el anticipo.

De un modo u otro, lo cierto es que los principales partidos se han puesto manos a la obra para defender la importancia de las europeas –todos coinciden en el democrático comentario de que hay que reducir la abstención que suele acompañar a esta cita con las urnas porque en la UE nos jugamos mucho– y echar a rodar una maquinaria oxidada tras más de dos años sin comicios y después de tres victorias consecutivas de los conservadores en la comunidad autónoma.

La secretaria general del PP-A, Dolores López, decía abiertamente la pasada semana que para los populares sí es la ocasión de prepararse para las autonómicas, “que serán en otoño porque Susana Díaz cada día demuestra que está más centrada en Ferraz que en la comunidad autónoma donde gobierna”, en referencia a las aspiraciones que le presumen a la presidenta de convertirse en futura secretaria general del PSOE y donde, como paso previo, se sometería a las urnas en Andalucía.

Ese interés, que para la número dos del PP-A está claro, junto a la necesidad de “no dar tiempo a que los andaluces palpen los buenos resultados de las políticas de Mariano Rajoy” y a que se promocione el recientemente elegido presidente de los populares, Juan Manuel Moreno, son ingredientes más que suficientes para hacerles apostar “sobre seguro” por un adelanto electoral. “No queda mucho de legislatura”, la secunda el líder del PP-A.

Mientras, desde el PSOE-A insisten en que de momento no existe esa posibilidad. Lo ha dicho la presidenta, que es la que tiene la última palabra en esto, si bien en julio de 2013, cuando todavía era consejera de Presidencia e Igualdad pero ya había sido proclamada candidata del PSOE-A a las autonómicas tras el paso atrás de José Antonio Griñán, no descartaba un adelanto electoral.

Hablaba de “la dificultad de la legislatura”, aludiendo a elementos que podían distorsionar la puesta en marcha del programa de las dos fuerzas que sostienen el Gobierno de Andalucía. Pero también entonces afirmaba que entre sus planes no estaba ser secretaria general del PSOE-A, en lo que se convertiría un par de meses después.

El secretario de Organización del PSOE-A, Juan Cornejo, interpreta que los populares sacan este tema porque están “asustados”, pero reitera que la presidenta “está centrada en gobernar Andalucía”. Sí reconocía en una entrevista con eldiario.es/andalucía que para el PSOE-A las europeas son el momento de poner en marcha una estructura “muy compleja” de cara a “las municipales de 2015”, que es lo próximo que ve en el horizonte.

“No hay intención ninguna de adelantar las autonómicas, sino de desarrollar el programa de gobierno con IU”, puntualiza. En esta línea se pronuncia el portavoz del Gobierno de Andalucía, Miguel Ángel Vázquez, para quien “las especulaciones son libres, pero no hay ninguna hipótesis de adelanto electoral”, como ha dicho la presidenta “por activa y por pasiva”.

Los elementos que decidirán

Dos cuestiones son clave para definir ese posible escenario. Por un lado, la convocatoria de primarias en el PSOE, donde el actual secretario general, Alfredo Pérez Rubalcaba, se presentaría si el partido gana las europeas. Si pierde, en el entorno de Susana Díaz aseguran que ella no permitirá que se le adelante un nuevo valor y que desde Andalucía forzarían la convocatoria de un congreso extraordinario para convertirse en la persona que “salve la situación”. Para ello, primero querría presentarse a las autonómicas y tomar posesión como presidenta “votada” y no por renuncia, como ha ocurrido. Y por otro lado, la elaboración de los presupuestos autonómicos de 2015, que pueden alumbrar una ruptura del pacto con IU. Y ambas cosas van de la mano.

En este sentido, si complicado fue cerrar los presupuestos autonómicos para el presente ejercicio –debido a un recorte de más de 1.000 millones de euros que colocaron las cuentas a los niveles de 2007 y por debajo de la barrera psicológica de los 30.000–, las dos fuerzas que sostienen el Gobierno de Andalucía saben que igual o más difícil será cuando pasado el verano tengan que volver a sentarse a hablar de números. La coalición de izquierdas tensará la cuerda y esta vez el PSOE-A quizá no vea tan dramático que se rompa porque su nueva secretaria general “tiene prisa” por batirse en las urnas, como apuntan fuentes del partido.

En este contexto, el vicepresidente de la Junta, Diego Valderas, ha dicho públicamente que hay miembros del PSOE-A que dan por hecho este adelanto electoral. De este modo, pese a que prefiere agarrarse a la intención de las dos fuerzas de agotar la legislatura y cumplir el pacto “porque interesa a Andalucía”, entiende que es una opción que no puede descartarse al 100%. “Interesa cumplir el pacto y aumentar la velocidad en que lo hacemos”, decía hace unos días, insistiendo en que los populares calientan este debate porque les beneficia. Cree también que sería “torpe” adelantar los comicios, pero que “en el PSOE-A hay alguna gente” que es partidaria de hacerlo.

En la misma línea, sostiene que “siempre puede ocurrir que mañana se convoquen” y en eso cree que IU tendrá algo que decir. “Es lo lógico, como cuando una pareja se separa”, manifestaba gráficamente la pasada semana. No obstante, fuentes del partido aseguran que la cita clave serán las municipales.

Eso sí, celebrados los congresos de sus rivales, la coalición de izquierdas es la única que todavía no tiene elegido su candidato para las autonómicas, pese a que su coordinador regional, Antonio Maíllo, mantiene la condición de favorito. Precisamente, Maíllo considera que se viven “tiempos agitados y nunca se puede saber cuánto puede durar una legislatura”. Recuerda que “los rumores no son noticia” y señala que IU “está en las cosas serias”. Mientras, el secretario general del PCA, José Manuel Mariscal, advierte: “Si el PSOE-A decide seguir otro camino que no es el acordado, habrá adelanto electoral”.

Con este panorama, en lo que coinciden todos es que para el caso de Andalucía el próximo 25 de mayo se vota algo más que a los representantes del Parlamento Europeo.

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