“Esto es una dictadura: nos quitan la cultura y la salud”
“El empobrecimiento de las condiciones de trabajo de los empleados públicos supone un empobrecimiento de los propios servicios públicos”. Esta es la clave del discurso de la Plataforma para la Defensa de los Servicios Públicos y el Estado de Bienestar (que agrupa a prácticamente todos los sindicatos del sector público salvo nacionalistas y STEE-EILAS), que se ha manifestado frente al Parlamento vasco durante el debate de las enmiendas a la totalidad de los presupuestos para 2014. “Esto es una dictadura: nos quitan la cultura y la salud”, acusó la Plataforma al Gobierno vasco durante la concentración. El deterioro de las negociaciones con el Ejecutivo de Vitoria ha llevado a estos sindicatos a pedir ayuda al Parlamento, que en las próximas semanas aprobará las cuentas para el próximo año. La confianza de la Plataforma es que los grupos parlamentarios se hagan eco de alguna de sus reivindicaciones durante el debate de las enmiendas parciales y así “revertir la situación de los recortes”.
Aitor Rabanal, uno de los portavoces de la Plataforma, advirtió al Gobierno de que las movilizaciones se van a suceder durante el periodo que duren las negociaciones de los presupuestos en el Parlamento. “El proyecto presentado por el Gobierno suponer mantener los recortes y ahondar en el deterioro que los servicios públicos están sufriendo. No hay contratos para sustituciones, no hay convocatorias de OPE, se incrementan las jornadas de trabajo, hay una pérdida de poder adquisitivo de los funcionarios.....todo conduce al empobrecimiento de los servicios públicos”.
Entre otras reivindicaciones, la Plataforma reclama la jornada anual de 1.592 horqas, recuperar días de antigüedad, garantizar las sustituciones y la recuperación salarial (cufran enntre un 27-30% la pérdida de poder adquisitivo en los últimos cuatro años). “Somos plenamente conscirntes de que la crisis es global y afecta a toda la sociedad. Nuestras protestas son de perfil bajo por ahora, pero si se mantienen en el tiempo los recortes y la imposibilidad de negociar las cosas se pueden complicar”.
Sobgre la ausencia de los sindicatos nacionalistas, Rabanal ha explicado que “han rehusado nuestras invitaciones a a participar. Los recortes no tienen ideología, afectan por igual a todos los trabajadores. Piensen como piensen”.
