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El imparable deterioro de la asignatura de música en la escuela pública

Alumnos con el xilófono. Foto: Carles Palacio

Eduardo Azumendi

“Las ramas artísticas nunca han terminado de encajar en el sistema educativo”. Ese es el lamento de J.A, profesor de música en un colegio público de Euskadi, quien curso tras curso ve como la asignatura pierde prestigio y respeto entre el alumnado. Las sucesivas reformas educativas, y de manera especial tras la Lomce, han relegado a la música a un papel testimonial. A esa significativa pérdida de importancia que en materia curricular ha sufrido esta disciplina también se añade una gestión del Departamento de Educación “poco protectora con el horario de la asignatura”, reprocha la Federación de Enseñanza de Comisiones Obreras Euskadi.

“Se ha permitido que la música se convierta en una ‘maría’, en la que lo menos importante es quién la imparte en cada centro, en perjuicio de los y las verdaderas profesionales de la misma”, denuncia el sindicato.

Esta pérdida de importancia de la música en la enseñanza pública reglada ha ido en paralelo al crecimiento que otros agentes (privados o municipales) han realizado en el sector. Así, “se ha dificultado el aprendizaje general y equitativo de la música que la escuela pública ofrecía hasta hace unos años. Ahora, las familias que pretenden inculcar el sentimiento musical en sus hijos optan mayoritariamente por un aprendizaje al margen de la enseñanza pública obligatoria, paso previo a la especialización en los conservatorios”.

Mejor suerte puede tener el nuevo proyecto educativo del centro público de Enseñanza Superior no universitario de Danza y Teatro-Dantzerti, ubicado en Bilbao. Pero, Comisiones Obreras también advierte que aun quedan cuestiones que no están clarificadas de manera adecuada. La primera se refiere a la titulación que obtendrá el alumnado que realice estos estudios superiores. Según el Departamento será equivalente a la de grado y, se sobreentiende, que con validez para continuar estudios posteriores, como los masters. Sin embargo, Comisiones recuerda que “una sentencia del Tribunal Supremo a demanda de algunas universidades, lo constriñe al territorio español”. Ello significa que el alumnado que realice estas enseñanzas y quiera continuar estudios, por ejemplo en Francia, no estará autorizado para ello.

Además, Comisiones cuestionar la forma en que se ha realizado la cobertura de plazas en Dantzerti para esta puesta en marcha, que ha sido “poco diáfana y con criterios más ideológicos que propiamente educativos”.

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