El IGN confirma que dos fallas provocan los terremotos en La Loma
El Instituto Geográfico Nacional (IGN) ha confirmado la tesis defendida por la Universidad de Jaén sobre el origen de los terremotos en la comarca de La Loma. “No son de origen antrópico”, ha dicho el directo de la Red Sísmica Nacional, Emilio Carreño, “son de origen tectónico, son fallas las que producen estos terremotos”. En esa misma línea ya se había expresado el grupo de investigación sobre Riesgo sísmico y téctónica activa de la Universidad de Jaén que forma parte del equipo de expertos que ha emitido el informe. Un equipo en el que también hay investigadores del Centro Superior de Investigaciones Científicas, las universidades de Granada y Navarra, y el Instituto Geológico y Minero, entre otros organismos.
El informe descarta el 'fracking' y sólo el experto de la Universidad de Navarra mantiene como teoría la hidrosismicidad. “El resto del grupo opina que no”, ha dicho Carreño sobre esta opción y ha anunciado que la semana próxima se desplazarán a Torreperogil y Sabiote, los municipios afectados por el enjambre sísmico, para explicar directamente a los vecinos las conclusiones sobre el origen de los temblores. Será el próximo miércoles, a las 5 de la tarde en Torreperogil y a las 7 en Sabiote.
Los alcaldes de ambos municipios han acudido a la reunión de expertos, donde les han entregado las conclusiones y explicado las líneas generales. Al término de la reunión, la alcaldesa de Torreperogil, Jose Caballero, ha señalado que “la presión de los vecinos” ha tenido “bastante que ver” para que se concluyera este informe, que comenzó a gestarse hace un año, cuando empezaron los seísmos. De hecho, las movilizaciones se han desconvocado a la espera de que la semana próxima los expertos expliquen los resultados del estudio a los vecinos.
Para el alcalde de Sabiote, las conclusiones y la visita de los expertos prevista para semana próxima “va a tranquilizar mucho a los ciudadanos”. No obstante, ha destacado que la relevancia de seguir trabajando en el conocimiento de las fallas y completar el desarrollo de los planes de emergencia para “seguir sensibilizando a la población”.
Lo que el IGN trasladará a la ciudadanía es que “existen al menos dos estructuras, dos fallas, que hasta ahora se desconocían, que están separadas por uno o dos kilómetros y a una profundidad de unos cuatro kilómetros, que son las causantes de esos terremotos”, ha indicado Carreño. Con esos datos “no podemos asegurar si puede haber o no más terremotos”, tampoco su intensidad o gravedad, en caso de que se produjeran. Para esto necesitaría un estudio a lo largo del tiempo que pudiera precisar, por ejemplo, la longitud de la falla y los movimientos que ha seguido hasta ahora.
Trabajo en materia preventiva
En lo que sí se puede trabajar ya es en materia preventiva. De hecho, Carreño ha explicado que un técnico del instituto ha visitado “barrio por barrio” ambos municipios para intentar determinar “por qué ha habido esas amplificaciones tan grandes, por qué dentro de una misma población hay unas variaciones tan importantes” en cuanto a la intensidad de los terremotos. Esto “los alcaldes lo van a tener en cuenta, seguramente, en próximas infraestructuras” para determinar qué zonas de sus municipios son más sensibles a los movimientos.
Los seísmos comenzaron el 15 de octubre del año pasado y, hasta la fecha, se han registrado alrededor de 2.200. La serie de temblores de Torreperogil y Sabiote es “de toda la historia, la que más datos tiene”, ha dicho Carreño, aunque para “dar una respuesta segura al cien por cien” sobre las causas necesitarían estudiar las fallas “durante siglos”. Como ejemplo ha citado que existe información acumulada sobre la sismicidad en la región de Murcia desde hace tres siglos. En La Loma, acaban de empezar las investigación y, de momento, la Universidad de Jaén va a continuarla.
