Piden 14 años de cárcel al asturiano que intentó asesinar a puñaladas a su mujer por querer divorciarse

La Fiscalía del Principado de Asturias solicita 14 años y 10 meses de prisión, inhabilitación absoluta, alejamiento y libertad vigilada para un procesado por intentar asesinar a su mujer en Grado en junio de 2024. La vista oral se celebrará mañana, viernes, ante el tribunal de la Sección Tercera de la Audiencia Provincial.

El acusado, de 62 años, residía en el domicilio familiar junto a su esposa y su hijo en la localidad de Grado. Cuando la mujer le comunicó su decisión de divorciarse, el marido reaccionó violentamente, ya que no lo aceptaba al sospechar que podía deberse a la existencia de una tercera persona.

Esperó a que no estuviera su hijo

El Ministerio Fiscal sostiene que, el 7 de junio de 2024, el procesado esperó a que su hijo se fuera a trabajar, en torno a las siete de la mañana, para entrar en la habitación matrimonial, donde dormía su esposa, a la que despertó dándole un puñetazo en el oído al tiempo que le pedía que le desbloqueara el teléfono móvil.

Ambos iniciaron una discusión y, según el relato fiscal, el procesado decidió acabar con la vida de la mujer.

“Así, el hombre se dirigió a la cocina, cogió un cuchillo de unos 12,5 centímetros de hoja y regresó a la habitación. Sin ofrecer a la víctima ninguna posibilidad de defensa, se acercó a ella asestándole varias puñaladas en el pecho, arrinconándola entre la pared y la cama. Allí continuó apuñalándola en diferentes partes del cuerpo, mientras ella gritaba pidiendo auxilio”, añade el escrito de calificación provisional.

Pensó que estaba muerta

El procesado, creyéndola muerta, salió de la habitación, momento en el que la mujer aprovechó para intentar llegar al baño y encerrarse en su interior, lo que no consiguió ya que se desplomó en el suelo debido a la gran cantidad de sangre que estaba perdiendo.

El procesado, alertado por el ruido del cuerpo al caer, regresó y le asestó una nueva cuchillada en el suelo mientras le decía: “Sigues viva, hija de puta”, añade la Fiscalía.

La mujer se hizo la muerta, taponándose como pudo la herida del pecho con una toalla, y permaneció inmóvil hasta que fue auxiliada por los agentes de Policía que acudieron al domicilio, alertados por los vecinos.

Tranquilizantes

El procesado, que en algún momento había cerrado con pestillo la puerta de la casa, se tomó después de los hechos una cantidad indeterminada de tranquilizantes.

La Fiscalía considera que las heridas sufridas por la mujer hubieran supuesto un riesgo cierto e inminente para su vida de no haber recibido atención médica.

El Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 1 de Grado decretó a petición de la Fiscalía asturiana el ingreso en prisión provisional comunicada y sin fianza del procesado, al que impuso igualmente la prohibición de aproximarse a menos de 500 metros a la víctima, a su domicilio y cualquier lugar que ella frecuente, así como de comunicarse con ella por cualquier medio hasta la finalización del procedimiento mediante sentencia firme.

Asesinato en grado de tentativa

La Fiscalía califica los hechos como un delito de asesinato en grado de tentativa en el que aplica la concurrencia de las circunstancias agravantes de parentesco y de haber actuado por motivo de género.

El Ministerio Fiscal solicita por este delito una condena para el acusado de 14 años y 10 meses de prisión, con inhabilitación absoluta durante el tiempo de la condena; prohibición de aproximarse a menos de 500 metros a la víctima, a su domicilio, su trabajo o cualquier lugar que frecuente, aunque no se encuentre en él, así como de comunicarse con ella por cualquier medio, todo ello por un periodo de tiempo superior en 8 años al de la pena de prisión que se imponga en sentencia; así como la medida de libertad vigilada durante 8 años.

Las indemnizaciones

A la pena de cárcel suma también el pago de una indemnización a la víctima que se determinaría, en caso de condena, en ejecución de sentencia por las lesiones, las secuelas que le hayan quedado y los daños morales.

Asimismo, el Ministerio Fiscal reclama que el acusado indemnice al Servicio de Salud del Principado de Asturias (SESPA) por los gastos médicos ocasionados.