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Aplazado el comienzo del curso en la Casa del Marino por el brote de COVID-19 entre los migrantes: “Nos debemos centrar en la atención sanitaria”

Dos migrantes entrando a la Casa del Marino en una imagen de archivo.

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El Instituto de Formación Profesional Marítimo Pesquero de Las Palmas de Gran Canaria aplaza el inicio del curso ante la “situación sanitaria” del establecimiento en el que se imparten las clases. La Casa del Marino, que funciona como recurso de acogida para migrantes desde noviembre de 2019, ha sido uno de los puntos en los que la Consejería de Sanidad del Gobierno de Canarias registró un brote de COVID-19, con al menos 38 positivos. “Dada la situación sanitaria acaecida en el edificio donde está ubicado nuestro centro, así como el estado de incertidumbre en el que nos encontramos en Canarias para comenzar el curso 2020/2021, informamos que los cursos previstos por el IFP Marítimo Pesquero de Las Palmas de Gran Canaria [...] están a la espera de ratificar fechas definitivas para su realización”, explicó el instituto en la web. La Delegación del Gobierno en Canarias asegura que en el edificio no hay ningún problema sanitario y que las personas están cumpliendo con un aislamiento “igual que cualquier familia”. Además, está prevista una reunión con la directiva del Instituto para conocer cuáles son los problemas con los que cuenta el centro para iniciar el curso.

Preguntado por la posibilidad de localizar un establecimiento alternativo en el que comenzar el año académico, el director del IFP, Juan Antonio Socorro Cruz, ha respondido a Canarias Ahora que “es muy complicado encontrar unas instalaciones” porque requieren características específicas como aulas de simuladores, talleres, aulas de radio o aulas de idiomas. “Estamos viendo el plazo más corto en el cual se podrían empezar las clases, sin riesgo para los alumnos por los positivos de COVID en cuarentena en el edificio. Esperamos que quizás la próxima semana se pueda adelantar, pero de momento la fecha más temprana es el 2 de octubre”, aseguró.

Cruz Roja, la ONG que gestiona este recurso para migrantes, ha especificado que en la Casa del Marino no hay personas positivas, sino que las que están alojadas están realizando una cuarentena. “Lógicamente la situación sanitaria impide que la actividad normal del centro se desarrolle como hasta ahora. Nos debemos centrar en la atención de las necesidades básicas y sanitarias, y hemos tenido que paralizar por el momento el asesoramiento legal, social y las actividades de integración (talleres, actividades grupales, clases de castellano...)”, subraya.

La Cadena SER avanzó que todas las personas contagiadas llevaba ya muchos meses en las islas, por lo que no se trataba de casos importados, ya que dieron negativo en la PCR cuando llegaron a Canarias. Este mismo medio reveló que las condiciones de los centros de acogida fueron las que provocaron este brote de contagios, ya que las personas estaban en situación de hacinamiento, con “condiciones de salubridad lamentables”.

La Casa del Marino comenzó a albergar a migrantes antes de la pandemia, a principios de noviembre de 2019. El espacio se habilitó después de que un fallo de coordinación dejara durmiendo en el Parque Santa Catalina, en la capital grancanaria, a un grupo de 40 personas.

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