Negritos, Clavijo, PP, Vox… y Page

No sé si, en realidad, fue una pesadilla. Pero me parece guardar en la memoria la convocatoria de una manifestación en Santa Cruz de Tenerife contra la “invasión” de migrantes africanos de piel oscura. Fue, si no recuerdo mal, allá por 2006. Era el tiempo de las pateras. Recuerdo también que los convocantes eran individuos vinculados al Ayuntamiento de la propia capital tinerfeña como asesores, o algo así, del Gobierno municipal de Coalición Canaria.

Eran tiempos también en los que incendiarios editoriales del periódico El Día hablaban de las enfermedades contagiosas que nos inocularían los migrantes africanos, de la fuerza de los genes de las personas de raza negra sobre los de las de raza blanca…y lanzaban a los cuatro vientos tantas proclamas racistas y xenófobas. El Día se erigió en valedor y director de orquesta de aquella vergonzosa manifestación y enaltecía a sus promotores. Por fortuna para la dignidad de la sociedad tinerfeña, fue un clamoroso fracaso.

¿Habré soñado alguna vez que Carlos Alonso, de Coalición Canaria, presidente a la sazón del Cabildo de Tenerife, exclamó “aquí no somos negros, somos españoles, personas normales” (2 de octubre de 2020), con ocasión de alguna arenga victimista y agravista de las que se han venido alimentando Clavijo,sus predecesores y sus epígonos como pintura de camuflaje de los intereses reales que representan?

Será tal vez fruto de mi imaginación que, en plena crisis migratoria, cuando los africanos se hacinaban en condiciones infrahumanas en el muelle de Arguineguín, después de que Coalición Canaria y PP se esmeraran varios años en desmantelar las instalaciones de acogida de migrantes, la alcaldesa de Mogán, Onalia Bueno, amenazó con sanciones a los hoteles que hospedaran temporalmente, a instancias del Gobierno de España, a los negros migrantes. Y, a renglón seguido, cumpliera con sus amenazas. ¿No es Onalia, por ventura, el gran fichaje estrella de Clavijo en la Isla de Gran Canaria?

¿No fueron los epígonos de Clavijo en La Laguna quienes repartieron un panfleto asqueroso denunciando el “agravio” de que los migrantes fueran alojados (temporalmente, claro) en hoteles, en vez de que sean los canarios los que disfruten de esas estancias gratis total?

Que si “convertir a Canarias en una nueva Lampedusa”…o “en otra Lesbos”, repetidos tantas veces como si fuera una matraquilla, para sembrar rechazos y odios contra los migrantes.

Y así, una ristra interminable…

Con un desprecio insuperable a la inteligencia de la gentes de esta tierra, ahora nos viene a decir que “ni unos ni otros quieren a los negritos en España” (10 de junio).

Quienes no han querido nunca a los negros son Clavijo y los suyos, demostrando cuál es la ideología del que dice “no soy de izquierdas ni de derechas: soy canario”.

Tampoco los quieren el sempiterno aliado de Coalición Canaria, el PP de allá y de “aquí acá”, que ha recurrido ante el Tribunal Constitucional el Decreto-Ley de reparto de menores migrantes en todas las Comunidades Autónomas que preside, en solitario o coaligado y sumiso a los dictados y prejuicios de la extrema derecha.

Extrema derecha con la que, sin intermediarios, Clavijo pacta para desalojar al PSOE en cualquier ayuntamiento donde quiera que lo tranque, como decimos por estos lares.

¡Ah! Y un “paje” dispuesto a hacer el mayor daño a su propio ¿..? Partido para conservar no sé qué apoyos electorales en La Mancha o aspirar a no sé qué liderazgos en la política española.

El Gobierno estatal, los socialistas de toda España y los socialistas canarios hemos apoyado convencidamente la distribución solidaria de los menores migrantes no acompañados, frente a la cada vez más evidente actitud de toda la derecha -aliada de Clavijo y de la que pende un Gobierno al que retornó después de perder (otra vez) las elecciones- de tratar a nuestras Islas como país tercero, tal y como Meloni y otros gobernantes europeos han utilizado a Albania, a Turquía y a quien necesite o se deje utilizar como patio trasero de Europa. ¿O tratar a las islas simplemente como una colonia, como la última colonia? Con la vergonzosa pasividad (y grotesca equidistancia) del que se dice “canario, ni de izquierda ni de derecha”.

Posdata. Las exigencias al Gobierno España de “máxima transparencia en materia de contratación” -que comparto plenamente-, planteadas por Clavijo y Cía, mejor las dejo para otro día. Y, a lo mejor, les cuento entre otros asuntos transparentes el caso Reparos y unos “buenos pocos más”, como dice un amigo de Punta del Hidalgo.