Defensa cierra el cuartel de San Francisco en Tenerife
El Ministerio de Defensa ha anunciado este viernes que tiene previsto cerrar en Tenerife el acuartelamiento de San Francisco, así como otras tres dependencias que serán trasladadas a otras instalaciones en la misma isla, dentro de los planes para racionalizar su patrimonio inmobiliario. En concreto, la Comandancia de Obras (Cobra5) y el local de Logística (Alog81) se mudan al establecimiento Almeida y la jefatura de Intendencia se traslada al antiguo parque de Artillería.
Además, el cuartel de Hoya Fría se cierra parcialmente y algunas de sus unidades se trasladan al Gobierno Militar de Santa Cruz de Tenerife y a los cuarteles de Ofra Vista Bella y de Ingenieros de La Cuesta, según informa el Ministerio en un comunicado. Defensa estima que esta operación, que liberará 20.816 metros cuadrados de suelo urbano, le supondrá una inversión de 472.822 euros, pero, a cambio, le permitirá ahorrar 760.898 euros al año.
Los planes de racionalización también afectan en Canarias a Fuerteventura, isla donde se prevé el cierre parcial de residencias y alojamientos logísticos militares. En este caso, Defensa no precisa el alcance ni el coste de la operación de Fuerteventura, que está incluida en una rúbrica conjunta con instalaciones de Cádiz, Tarifa, San Fernando, Huesca, Málaga, Pamplona, Burgos, La Coruña y Alcalá de Henares (Madrid).
El plan de racionalización y utilización eficiente del patrimonio inmobiliario del Ministerio de Defensa incluye el cierre de varias residencias militares y hospitales, entre ellos el de Cartagena, además de la clausura de doce instalaciones en el centro de Madrid. El plan, en su primera fase (tres próximos años), contempla 49 actuaciones que prevén acometer una reorganización de la estructura periférica del Órgano Central del Ministerio, con el traslado de las subdelegaciones de Defensa a otras instalaciones situadas en el mismo municipio.
Racionalización de hospitales militares
Según los datos facilitados por Defensa, en los próximo tres años se propone el mayor ahorro con la racionalización de hospitales militares.
Entre ellos, la cesión del hospital naval de San Fernando, el cierre del hospital naval de Cartagena, el traslado y cierre de la farmacia militar del Ejército de Tierra del hospital militar de Ceuta a la Base de esta ciudad autónoma. Con esta medida, que supone una liberación de suelo de 224.111 metros cuadrados, pretende ahorrar 3,2 millones anuales.
Defensa también estima un ahorro anual superior a 1,6 millones de euros con la reorganización en Madrid, con el cierre de 12 instalaciones entre ellas el complejo de Raimundo Fernández Villaverde, la sede de órdenes militares de Velázquez, la subdelegación de Defensa y el complejo Princesa. También figuran la clausura del cuartel los Castillejos, la sede de la Gerencia de Cría Caballar, el antiguo hospital del Aire y el Complejo de Plaza de Castilla.
Asimismo incluye el traslado de residencia militar de atención a mayores Virgen del Carmen, con el que se estima ahorrar al año 1,4 millones de euros. El Plan de Defensa prevé el cierre de cinco residencias y alojamientos logísticos ubicados en Tarifa, Huesca, Málaga, Pamplona y San Fernando y el cierre parcial de las de Burgos, Cádiz, Alcalá de Henares, La Coruña y Fuerteventura.
Con ello estima un ahorro de casi 1,4 millones de euros anuales y la liberación de suelo equivalente a 2.675 metros cuadrados. También se cerrarán cuatro residencias militares de descanso ubicadas en Mahón, Algeciras, Jerez y Málaga, con un ahorro de 1,1 millones de euros anuales.
Entre las medidas propuestas por Defensa en la primera fase del Plan figura el traslado del Mando de Operaciones de Vitruvio, en el centro de Madrid, al cuartel de Retamares, en la localidad madrileña de Pozuelo de Alarcón, que dejará de ser de la OTAN. A este cuartel también se trasladará el Centro de Inteligencia de las Fuerzas Armadas, ahora en un inmueble en la céntrica calle de Joaquín Costa. Con estas dos últimas actuaciones se estima un ahorro de 627.409 millones de euros al año.
Defensa señala que los efectos del Plan sobre la plantilla será muy limitado porque se trata de una reorganización de infraestructuras, sin modificación de las competencias actualmente atribuidas a las unidades, y porque tiene en cuenta la evolución prevista de la plantilla, y la adaptación de las fases del proyecto a las posibilidades de adaptación.