El Gobierno canario anula la paralización parcial del servicio de ambulancias en la capital grancanaria para poder comer

Ambulancia del Servicio de Urgencias Canario en Las Alcaravaneras, en la capital grancanaria.

Iván Alejandro Hernández

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La Dirección General de Trabajo del Gobierno de Canarias ha resuelto levantar la medida de la paralización de las actividades de las ambulancias en Las Palmas de Gran Canaria, servicio que presta la empresa Transportes Aéreos Sanitarios Isleños, S.A. (Tasisa). En un escrito firmado por el Viceconsejero de Empleo, Gustavo Santana, del pasado 24 de agosto (por suplencia del director General de Trabajo) no aprecia “las circunstancias graves e inminentes en los riesgos laborales alegados para su adopción”.

El Sindicato del Transporte de Emergencias Sanitarias (Sites), que desarrolla su actividad en la empresa Tasisa, presentó el pasado 22 de agosto ante la Autoridad Laboral una comunicación exponiendo la paralización del servicio de forma parcial para poder comer, al carecer de la organización necesaria en Tasisa para ello. 

“Queremos recalcar que el hecho que se dificulte, niegue o no se haya establecido un horario de comida para turnos de 12 y 24 horas, es perjudicial para la salud los profesionales” detallaba Karlos Pérez, enfermero, delegando de Prevención y secretario de Sites, ejemplificando que podía provocar “desvanecimientos, alteraciones de conciencia, ansiedad o estrés”. Y ello, a su vez, que no puedan desempeñar sus funciones adecuadamente, afectando también “a los propios pacientes o viandantes”.  

Los representantes legales de los trabajadores de la empresa decidieron para durante dos horas al día: de 14.00 a 15.00 horas para el almuerzo y de 21.00 a 22.00 horas para la cena.

Tal y como recoge la Ley de Prevención de Riesgos Laborales, ante riesgo grave e inminente para la vida o la salud de los trabajores, los representantes legales podrán acordar la paralización de la actidad si la empresa no adopta las medidas para garantizarlas. A su vez, esta decisión tendrá que ser comunicada a la autoridad laboral correspondiente, que tiene la última palabra para anular o ratificar la medida.

Sin embargo, el 23 de agosto, la Inspección de Trabajo y Seguridad Social concluyó en un informe que “no se han constatado incumplimientos normativos que conlleven la generación de un riesgo grave e inminente para la seguridad y salud de los trabajadores”, por lo que proponía “la anulación de la paralización acordada”. 

Sin embargo, no descartaba proceder por “otro tipo de incumplimientos normativos”, y la Autoridad Laboral insta a Sintes a reclamar en este sentido. 

En su resolución, la Dirección General de Trabajo ahonda que “riesgo laboral grave e inminente aquel que resulte probable racionalmente que se materialice en un futuro inmediato y pueda suponer un daño grave para la salud de los trabajadores” y considera probado que no se ha acreditado “suficientemente”. Contra esta decisión cabe interponer recurso de alzada en el plazo de un mes.

Lucha contra la precariedad

En un comunicado, Sites expresó su disconformidad con la resolución de la Dirección General de Trabajo y espera volver a reunirse con la Inspección responsable, cuando defenderá “una postura racional” y de lucha contra la precariedad, ya que estima que Tasisa “vuelve a fallar a profesionales en su compromiso de velar por las condiciones laborales”.

Los delegados de Prevención critican que Tasisa vulneró sus derechos tras iniciar el procedimiento de paralización de la actividad para poder comer. “La empresa ni ha notificado dicha medida al personal que prestaba sus servicios, ni tampoco ha respetado los tiempos establecidos de paralización para que los profesionales pudieran comer”, señala el comunicado.

Según Karlos Pérez, “esta situación sigue agravando la conflictividad y el grado de desprecio que la empresa muestra a los representantes sindicales”, quien resalta el “alto grado de conflicto” existente porque Tasisa no garantiza “unas condiciones mínimas” para desarrollar la actividad y, además, presta “caso omiso” o “desinterés” por la situación. 

Sites insiste que “la única preocupación que deberían tener los técnicos en Emergencias, es la realización de sus funciones y no tener que sufrir una situación de estrés y agobio, que les genera tener unas condiciones laborales precarias, con empresas que anteponen el rédito económico a un servicio de calidad y no velando por sus profesionales”.

Tasisa es una filial canaria de Health Transportation Group (HTG), que nació en 2017 de la fusión las empresas que lideraban el mercado nacional y de Reino Unido en transporte sanitario, según especifica la compañía en su página web. Desde 2021, pertenece al fondo británico especializado en infraestructuras Real Assets IM.

Tasisa fue una de las principales adjudicatarias del concurso de ambulancias en Canarias, que prestan cuatro sociedades en el Archipiélago. En concreto, ganó los lotes correspondientes a una zona de Gran Canaria y toda la provincia de Santa Cruz de Tenerife, aunque posteriormente, una de las licitadoras que se fue de vacío, Atlantic Emergency, acudió al Tribunal Administrativo de Contratación Pública, que estimó sus demandas y ordenó anular la adjudicación a Tasisa de un lote en La Gomera y El Hierro y retrotraer el procedimiento hasta la presentación de ofertas.

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