Ricardo Romero: ''Lo que impacta de Bosnia es que los parques son cementerios''
El capitán de la Infantería Marina, Ricardo Romero Machín relató en El Salitre, en CANARIAS AHORA RADIO, su experiencia al estar destacado durante más de tres meses en Bosnia Herzegovina con la misión española Altea.
En la entrevista, Romero Machín calificaba la experiencia de muy grata, principalmente “al vivir en el entorno de una fuerza multinacional, convivir día a día con compañeros de otros países y personas que han afrontado una guerra cruenta y poder ver el cariño que nos tienen a las fuerzas de la Unión Europa que estamos desplegados en zonas”
Según nos aclara el capitán, el personal que fue destacado a Bosnia Herzegovina, que pertenece a la Unidad de Seguridad Canaria de la Infantería Marina de Las Palmas estaba formado por 42 hombres, todos ellos del batallón multinacional de la fuerza que la Unión Europea tiene desplegada en la Operación Altea, en Sarajevo, Bosnia Herzegovina.
El capitán Romero que, en su destacamento, era jefe de los sistemas de información y comunicaciones del batallón multinacional indicó que su tarea diaria consistía en controlar que todos los sistemas de información y comunicación funcionaran correctamente y que en todo momento los enlaces con el territorio nacional y con las fuerzas desplegadas en las zonas de operaciones realizaran su labor.
“Las habitaciones se distribuyen por países y la mayoría de los dormitorios son dobles”, manifestó el capitán, que lleva en el cuerpo 31 años, la mayoría de su vida militar ha estado en la Brigada de la Infantería Marina de Cádiz, y únicamente cinco años en Las Palmas. Según el capitán, en la convivencia en la zona hay que tener mucha paciencia y calma porque a veces se viven malos momentos. Es muy importante para los soldados el apoyo de las familias, “sobretodo al principio, cuando marchan a zonas de operación un tanto inquietas, aunque gracias a los medios de enlace con las familias que proporciona el Ministerio de Defensa, que son cabinas de teléfono o internet, la preocupación de los familiares disminuye, dentro de lo que cabe”. De todas formas, el capitán Romero Machín nos aclaró que la situación actualmente en Bosnia Herzegovina es de calma estable.
La primera vez que el capitán fue a Sarajevo fue a principios de marzo y lo que más le impactó fue la gran cantidad de cementerios improvisados que había en la ciudad.
“Los parques públicos, hoy en día continúan con tumbas y la gente paseo justo a su lado” expresó el capitán Romero, que había ido para realizar una fase de reconocimiento a la que suelen desplazarse sobretodo el personal de la Plana Mayor, para contactar con sus relevos y comprobar cómo está la zona de operaciones.
Sobre el cambio que ha llevado a cabo el Ejército, al dejar de centrarse en la defensa del país para trabajar por el restablecimiento de la democracia y la ayuda humanitaria, el capitán opinó que “nos hemos adaptado a los que nos lleva la vida” y resaltó que lo que más le ha impactado gratamente es la aparición del ejército profesional, ya que los medios y los sistemas del ejército actualmente son altamente tecnológicos y por ello, se necesita un personal con una gran capacitación que pueda hacer frente a ese sistema, explicó el militar.
También reconoció que en épocas de crisis el personal acude más al ejército. Destacó que el ejército proporciona una estabilidad en el trabajo y una formación con la que se puede acceder luego a la vida civil. Pero no todo es positivo para esta profesión, según el capitán Romero, pues confiesa que es un trabajo austero, sacrificado y con una dedicada vocación.