Todos los indicios de un chivatazo

Mira para otro lado El Mundo porque, como adelantó CANARIAS AHORA el pasado 20 de octubre, los deseos del clan Nuvoletta de infiltrar a uno de sus más destacados miembros de la política local del sur de Tenerife llegó a consumarse. En la lista del PP al Ayuntamiento de Adeje en las elecciones de mayo pasado figuró como número 4 el mencionado letrado Domenico di Giorgio, y así consta en el Boletín Oficial de Canarias de 26 de abril de este año. Pero, sorprendentemente, el PP presenta fuera de plazo un escrito para hacer constar que el señor Di Giorgio abandonaba la candidatura. Las explicaciones para tan intempestiva decisión ofrecidas ahora por la dirigencia pepera son de índole exclusivamente personal, pero si tenemos en cuenta que los pinchazos telefónicos comenzaron a principios de año y que no había necesidad política de tanta prisa para retirarse, la cosa tiene todo el olor, el color y el sabor de ser un chivatazo al más puro y genuino estilo español. Máxime teniendo en cuenta que el PP obtuvo sólo dos concejales, y el detenido iba en el cuarto puesto. Hubiera bastado con esperar al 22 de mayo y no transmitir la apariencia de que el PP no quería tener que ver con una trama mafiosa que todavía, principios de mayo, no se había destapado. Si no fuera porque es nombrar la bicha al día siguiente de que la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional haya echado al piso la instrucción del caso Faisán, casi estaríamos por sugerir al periódico de Pedrojota que echara un vistazo a tan lustrosa filtración, y si le queda tiempo, ya metidos en filtraciones, de cómo fue la que benefició al diputado del PP gallego al que otro ilustre empresario le regaló un Porsche a cambio de un favorcete.