El Ayuntamiento de Santander dejó sin gastar el pasado año 21,5 millones de euros, según se desprende de la liquidación presupuestaria que ha hecho pública el concejal de Hacienda, Victoriano Huergo. Este remanente, dinero presupuestado pero no gastado en el ejercicio previsto, se gastará este año para financiar nuevas inversiones y cubrir gastos diversos sobre la base de un presupuesto prorrogado, puesto que, transcurrido un cuarto del año ya, aún no se dispone de presupuesto para 2022.
Los remantenes son viejos conocidos del Ayuntamiento de Santander. La ley dice que un presupuesto ha de tener suma cero en su liquidación, sin déficit ni superávit, y que los ingresos y gastos han de cuadrar con la ejeución real de los mismos. La realidad es que, año tras año, lo plasmado en el papel, sobre todo a la hora de gastar, rara vez se cumple en su totalidad, por más que el equipo de gobierno y sus servicios técnicos digan que las previsiones sean realistas y factibles.
La cifra de 2021 en todo caso es sensiblemente inferior a la de los remanentes de 2020, que rondaron los 60 millones de euros. Dada la naturaleza de aquel ejercicio, primer año de la pandemia, los resultados fueron entendidos por todos, aunque se discrepó que se financiara con ellos en 2021 un plan de choque que incluía gasto corriente (a financiar con cargo a un presupuesto ordinario). Para 2022, los remanentes disponibles son un tercio inferiores, certificando el equipo de gobierno una ejercición presupuestaria del año pasado de en torno a tres cuartos de lo previsto.
A los remanentes del presupuesto ordinario, los 21,5 millones de euros antes citados, hay que añadirles otros 5,8 millones de euros más, correspondientes al gasto no ejecutado por el Instituto Municipal de Deportes (IMD), el cual depende de la órbita de gestión de Ciudadanos.
La liquidación presupuestaria de 2021 ha reflejado también una reducción de la deuda y el cumplimiento de los objetivos de estabilidad presupuestaria y de la regla de gasto, que, aunque se encontraban temporalmente suspendidos, se han cumplido, ha enfatizado Huergo.
201 millones
El presupuesto de 2021 ascendía a 201 millones de euros. De acuerdo con los datos de la liquidación, los ingresos municipales ascendieron a 190,8 millones de euros, lo que representa un grado de ejecución del 93,1%. El equipo de gobierno ha destacado el buen comportamiento del sector de la construcción, que se tradujo en un aumento de la recaudación por conceptos como el ICIO (Impuesto de Construcciones, Instalaciones y Obras).
En cuanto a los gastos, ascendieron a 152,6 millones, con un grado de ejecución superior al 74% con respecto a las previsiones iniciales, por lo que una cuarta parte de la previsión de gasto quedó sin ejecutar.
A cierre del ejercicio, el nivel de endeudamiento mostraba una nueva reducción de la deuda bancaria, que se situaba en 52,2 millones de euros, lo que representa un índice del 32,45%, “en mínimos históricos y muy por debajo del límite legal del 110% [de los ingresos corrientes]”.