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A vueltas con los libros de Revilla y el sueldo de De la Serna

Íñigo de la Serna, ministro de Fomento y exalcalde de Santander.

Rubén Vivar

Nuevo acto de Íñigo de la Serna en Cantabria y nuevo rejonazo a Miguel Ángel Revilla. Con los comicios autonómicos y municipales a la vuelta de la esquina, la relación entre el presidente del Gobierno de Cantabria y líder del PRC y exalcalde de Santander se ha enturbiado de tal forma que el cruce de reproches y acusaciones entre ambos dirigentes se está convirtiendo en una constante en un clima claramente preelectoral.

Así, De la Serna ha vuelto a aprovechar su presencia en la Comunidad Autónoma para lanzar un dardo envenenado a su contrincante político, al que ha exigido nuevamente que haga público el dinero que ingresa por la venta de sus libros que, según sus cuentas, asciende a varios “millones” de euros.

En las filas conservadoras creen haber mordido en hueso e insisten una y otra vez en cargar contra el regionalista por este asunto. De este modo, además de reclamar a Revilla que desvele la “fortuna” acumulada, recriminan al jefe del Ejecutivo regional que dedique más tiempo a la promoción de sus libros que a ejercer como presidente de la Comunidad. 

En esta línea, el titular de Fomento ha agradecido a su gabinete que le haya programado para la mañana de este martes la visita a las obras de mejora de la accesibilidad en la estación de tren de Bezana, un acto al que ha asistido Revilla. Y es que, según ha dicho el ministro con sorna, si ese acto se hubiese hecho por la tarde, “no habría podido contar con el presidente porque hoy tiene ocupada toda la tarde en San Sebastián y dedicada a firmar su libro, es decir, para sus intereses”.

De la Serna respondía así a las preguntas de los periodistas cuando estos le han cuestionado por el supuesto “pacto secreto” que alcanzó con el exconcejal de Ciudadanos, David González, para garantizarse la mayoría que había perdido en las urnas. “Aquí la única cuestión secreta que sigue habiendo en materia política en Cantabria es los millones de euros que gana el señor presidente por sus libros”, respondía el exalcalde de la ciudad matando dos pájaros de un tiro.

El sueldo de De la Serna

El PRC también ha armado su propio argumentario y, ante las acusaciones de los populares, contraatacan con las ausencias de De la Serna en el Parlamento de Cantabria cuando era diputado. De este modo, han instado al ministro a que haga público “cuánto dinero público cobró por no hacer su trabajo” mientras mantuvo escaño en el Parlamento, una etapa en la que faltó a nueve sesiones plenarias sin que conste que renunciara a los ingresos que sumaba a su sueldo como alcalde de la capital cántabra. 

Los regionalistas han exigido al ministro que “aplique sus exigencias de transparencia al dinero público, como marca la ley, y aclare ”si cobró irregularmente“ mientras compaginó su acta de diputado regional y la Alcaldía de Santander, ”sin asistir siquiera a las sesiones plenarias semanales“.

El PRC ha recordado que estos datos deben ser públicos, por lo que ha confiado en que el ministro “no tenga ningún reparo” en decir a los cántabros cuáles fueron las cantidades que percibió de la caja común de los santanderinos como alcalde, y de los cántabros como diputado, faltando, por ejemplo en marzo de 2016, a la mitad de las sesiones del Parlamento.

En este sentido, el PRC ha acusado a Iñigo de la Serna de venir a Cantabria a “vender humo y a buscar el enfrentamiento” con el presidente y secretario general del PRC, Miguel Ángel Revilla, en lugar “aportar soluciones rápidas y efectivas” a los problemas de los cántabros y “apoyar e implicarse” en los proyectos “estratégicos” para el futuro de la Comunidad Autónoma, como son el centro logístico de La Pasiega o el tren a Bilbao.

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