La subida del IRPF a las rentas altas en los próximos presupuestos divide al Govern
Cuando Junqueras pensaba que el principal problema para aprobar los presupuestos vendría de la obligada negociación con la CUP, esta semana se le ha abierto un nuevo frente en el propio Govern. CDC no quiere ni oír hablar de la subida del IRPF a las rentas más altas a las que el vicepresidente se abrió la semana pasada por primera vez. La consellera portavoz, Neus Munté, lo ha dejado claro en la rueda de prensa tras la reunión del Consell de Govern de este martes y, por si eso fuera poco, el propio president Puigdemont lo ha repetido por la tarde en un coloquio con empresarios.
“No nos gustan las subidas de impuestos generalizadas para cubrir los déficits en el sistema de financiación”, ha asegurado Puigdemont, que se ha mostrado contrario a “tocar el IRPF ni imaginar nuevas figuras impositivas” en las próximas cuentas que, por cierto, Munté ha empujado en su comparecencia, pasando de mayo, cuando estaban previstas, hasta “primeros de junio”. La postura de quien ocupa la primera silla de la Generalitat choca con la mostrada por Junqueras la semana pasada, que aseguró que estudiaría la subida de impuestos que le reclama la CUP para votarle favorablemente las cuentas.
El Govern se agarra al programa de Junts pel Sí para negarse a la subida del IRPF o cualquier otro impuesto. Según ha recordado Munté, aquel programa hablaba de “rebajar la presión fiscal” a las clases medias y bajas, pero no de gravar más a las más altas. La portavoz ha negado además que haya desacuerdos en el Govern sobre esta cuestión, pese a que el secretario de Economía, el republicano Pere Aragonés, ha defendido solo unas horas una subida de impuesto sobre la renta a los tramos superiores para aliviar la dependencia de la Generalitat del FLA (Fondo de Liquidez Autonómico).
Si los convergentes tienen el programa electoral de JxSí, los republicanos tienen a su favor una de las mociones aprobadas en el pleno de emergencia social del pasado marzo. En él, a instancias de la CUP, el grupo de gobierno aprobó un texto que reclamaba “estudiar la implementación de nuevas figuras fiscales, y mejora de las ya existentes como el Impuesto de Sucesiones, Impuesto de Patrimonio, tramo autonómico del IRPF”, para poder “incrementar los niveles de ingresos”.
Fuera del debate generado este martes sobre la posible subida, en el anteproyecto de medidas fiscales remitido por Junqueras al Consejo de Trabajo Económico no preveía ninguna subida del IRPF, como tampoco modificaciones sustanciales respecto a Sucesiones. De haber alguna modificación será una vez presentadas las cuentas ante los grupos parlamentarios y en la posterior negociación con ellos para obtener mayoría en la Cámara. El anteproyecto sí incluye, en cambio, leyes de impacto menor en la recaudación, como tasas ambientales.
