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Puigdemont anula su agenda de este viernes ante una crisis de Govern inminente

Puigdemont se reúne con consellers entre el malestar interno por el referéndum

Oriol Solé Altimira

Día de entradas y salidas de consellers en el despacho que el president de la Generalitat, Carles Puigdemont, tiene en el Parlament. Diversos miembros del Govern se han reunido este jueves con el president después de que Puigdemont dejara la puerta abierta a nuevos cambios en el Ejecutivo este miércoles. La crisis de Govern se prevé inminente, incluso se podría dar este viernes, según las fuentes consultadas. A última hora de la tarde de este jueves president ha anulado su agenda pública para este viernes, que incluía dos actos fuera de Barcelona, en Igualada y en Sant Sadurní d'Anoia.

El malestar interno dentro del Govern existente desde hace meses se ha acelerado en los últimos días. ERC y el PDECat, la antigua Convergència, se acusan mútuamente de no querer correr riesgos en la preparación del referéndum, pero mientras ERC se mantiene unida alrededor de Junqueras, las divergencias internas cunden en el PDECat, como se puso de manifiesto en el episidio de las dudas y el posterior cese del conseller Jordi Baiget.

Precisamente Puigdemont, el miércoles, apeló en el Parlament a la “confianza” como el elemento clave en el seno del Govern, y lo hizo también en clave interna hacia sus consellers y compañeros de partido. “La confianza no tiene nada que ver con las ideologías y las opiniones. Tengo confianza en gente que piensa diferente a mí, y esto pasa dentro del actual Govern”, reconoció el president.

A juzgar por los nombres para saltar del Govern que circulaban en la tarde y noche de este jueves y que no han sido confirmados, la crisis en el Ejecutivo apunta precisamente a una falta de confianza entre los consellers del PDECat y Puigdemont. Así, entre las personas con más opciones para ser relevadas del Ejecutivo figuraban la consellera de Ensenyament, Meritxell Ruiz; la titular de Governació, Meritxell Borràs y la portavoz, Neus Munté.

Los dos anuncios que salieron este miércoles por la tarde desde el Ejecutivo no han hecho más que aumentar la tensión. El paso al frente del vicepresident, Oriol Junqueras, y el conseller de Exteriors, Raül Romeva, para comprar las urnas ha dejado en fuera de juego a la consellera de Governació, Meritxell Borràs (PDECat), que era la teórica encargada de adquirirlas.

El primer intento de Borràs para comprar urnas, aunque fallido, le ha valido una querella de la Fiscalía y una investigación abierta ante el TJSC. La consellera, hija de uno de los fundadores de Convergència y miembro de la vieja guardia del partido, no inició la adquisición directa de urnas tras el fracaso del primer concurso, lo que ha llevado a Junqueras y Romeva a asumir la competencias de la compra de urnas.

Vicepresident y conseller de Exteriors han reclamado que la orden para la adquisición de las urnas sea colegiada y Puigdemont, según la agencia Efe, ha aceptado esta petición. Por otro lado, el anuncio de Puigdemont para crear la figura de un coordinar del referéndum no ha frenado las tensiones dentro del ejecutivo por la carga de responsabilidades ante el 1-O.

De momento, por el despacho del president en el Parlament han desfilado este jueves, por el lado de consellers de ERC, la titular de agricultura, Meritxell Serret, y por el lado del PDECat, la titular de Governació, Meritxell Borràs, el conseller de Territori, Josep Rull, y el nuevo titular de Cultura, Lluís Puig. Puig entró en el ejecutivo tras la salida de Jordi Baiget por expresar sus dudas sobre el 1-O, su miedo por la pérdida de su patrimonio y, en especial, por criticar que los consellers tuvieran que poner su firma a decisiones tomadas por un “núcleo duro” de colaboradores de Puigdemont y Junqueras externo al Govern.

Fuentes independentistas aseguran que como mínimo dos de los siete consellers del PDECat comparten el diagnóstico de Baiget. La coordinadora del PDECat, Marta Pascal, está al tanto de los encuentros del president después de que el cese de Baiget abriera una Brecha entre Puigdemont y la dirección y el entorno de Artur Mas. Artur Mas, en un comunicado, ha declarado su apoyo y el del PDECat a Puigdemont “haga lo que haga el president”. La CUP, socio parlamentario de Puigdemont, no ha sido citada.

Mientras, la consellera de Agricultura, Meritxell Serret (ERC), en una entrevista en El Punt Avui, ha enviado un mensaje opuesto al de la entrevista de Baiget en el mismo diario que le costó el cese. “¿Qué me puede suponer que me embarguen los bienes? Tengo una hipoteca y un coche de segunda mano...”, ha dicho Serret.

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