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Desencuentro total entre Junta y Ayuntamiento sobre el silo nuclear en Villar de Cañas

Terrenos del ATC en Villar de Cañas / Foto: EUROPA PRESS

eldiarioclm.es / EUROPA PRESS

No hay aproximación de posturas entre el Gobierno de Castilla-La Mancha y el Ayuntamiento de Villar de Cañas sobre la futura instalación del cementerio nuclear en esta localidad. El alcalde del municipio conquense, José María Saiz, ha defendido la viabilidad de este almacén de residuos nucleares en su municipio “porque es un proyecto de Estado que hay que hacer” y ha alertado de que sólo una orden ministerial lo paralizará. Mientras, el vicepresidente del Gobierno regional, José Luis Martínez Guijarro, ha asegurado que pueden llevar este asunto a los tribunales.

Tanto el alcalde como el vicepresidente han realizado estas manifestaciones al término del encuentro que han mantenido, por tiempo de dos horas, con el presidente regional, Emiliano García-Page. El primer edil de Villar de Cañas ha anunciado que el Ayuntamiento ha contratado un equipo de abogados medioambientales que preparan una acción contra la declaración de Zona de Especial de Protección de Aves (ZEPA) que ha iniciado el Gobierno regional para frenar la construcción del silo. De hecho, ha avanzado que el 1 de octubre en Villar de Cañas se va a crear una plataforma de afectados contra esa ZEPA. “Por las buenas lo que haga falta, por las malas iremos al contencioso-administrativo que vamos a ganar porque esa declaración de ZEPA esta mal hecha”, ha advertido.

“Nos ha reconocido --en alusión al presidente regional-- que esa ZEPA está mal hecha y que la van a revisar los servicios técnicos, porque una declaración de este tipo conlleva un periodo de cinco o seis años. En Villar de Cañas no hay ninguna abubilla”, ha defendido. Dicho esto, se ha mostrado confiado en que el silo “se va a hacer seguro”. “El ATC me lo dio una orden del Ministerio de Industria y solo una orden de ese Ministerio me lo puede quitar. Ahora el Gobierno regional solo pone palos en la rueda. Es un proyecto de Estado que hay que hacer”, ha insistido.

Por ello, ha calificado de “decepcionante” el encuentro con García-Page porque el presidente “está con la manía y sigue en sus trece de paralizar el ATC y yo como alcalde sigo dispuesto a seguir defendiendo la viabilidad del proyecto, que cuenta con una inversión de 1.000 millones de euros”.

En cuanto al informe de Greenpeace, que alerta del riesgo de transportar por más de 200 municipios del país esos residuos nucleares hasta llegar a Villar de Cañas, el regidor de este municipio ha acusado a esta organización de no ofrecer toda la información, pues ha añadido que en Europa “se hacen miles de desplazamientos de residuos nucleares, como pasa en España, y este es el transporte más seguro del mundo. No ha habido ningún accidente en Europa de estas características”, ha precisado. “Si no se hace el ATC, tenemos que llevar los residuos nucleares a Francia desde Cofrentes. ¿Cómo los llevamos, por telepatía?”, ha terminado preguntándose.

De los planteamientos urbanísticos y medioambientales a los judiciales

De su lado, el vicepresidente ha indicado que de momento el Gobierno regional está recurriendo a “planteamientos urbanísticos y medioambientales” para frenar este proyecto, aunque ha señalado que si no se da el acuerdo y el Ministerio no ceja en su intención de ubicar el cementerio nuclear en Villar de Cañas “habrá que valorar si recurre las decisiones desde el punto de vista judicial, porque como toda decisión administrativa puede ser recurrida en el contencioso-administrativo”.

“Hay otras instancias que pueden estar por encima de una orden ministerial”, ha dicho Martínez Guijarro, que ha asegurado que hay “muchas posibilidades” de que el Gobierno regional recurra las autorizaciones del Ministerio de Industria si prosigue en su determinación de seguir construyendo esta infraestructura. A cambio del ATC, el Gobierno regional ofrece un plan específico que “generaría más empleos que la gestión pura y dura del cementerio nuclear”. En este sentido, ha asegurado que ya hay empresas “antagónicas a lo nuclear” interesadas en instalarse en Villar de Cañas si no estuviera el ATC.

En cuanto a la ZEPA, el número 'dos' del Ejecutivo autonómico ha defendido que son los técnicos en medio ambiente los que tienen que analizar esa declaración “y no el alcalde de Villar de Cañas ni ningún otro responsable político”. Por último, respecto al transporte de residuos nucleares, Martínez Guijarro ha dicho que “nadie” discute que este tipo de transporte genera problemas de seguridad, porque además de implicar riesgos, frena el desarrollo de la comarca, como ha sucedido en Trillo.

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