“A la vista de las anteriores exposiciones, como responsable del contrato, proponga la aceptación del importe propuesto por la empresa Nautalia Viajes S. L., por la adecuada justificación presentada”. Un informe de la Autoridad Portuaria de Valencia (APV) al que ha tenido acceso elDiario.es (documento completo al final de la información) avaló en estos términos la oferta económica presentada por Nautalia para el concurso de agencia de viajes. Sin embargo, a pesar de sacar la máxima puntuación, quedó excluido en favor de Europa Travel, cuya consejera delegada es Eva Blasco, amiga íntima de la presidenta de la APV, Mar Chao.
La APV requirió a Nautalia que justificara su oferta económica considerada “anormalmente baja”. La compañía presentó un documento detallado en el que explica que “se beneficiaría de las comisiones y sobrecomisiones que tiene pactadas con sus proveedores”, lo que le permitiría obtener unos beneficios de 3.713 euros. En su informe, la APV concluye que la oferta de Nautalia “no puede entenderse como anormal o desproporcionada” y de resultar adjudicataria no peligraría “la viabilidad del contrato o su correcta ejecución”.
En la reunión de la mesa de contratación del 28 de noviembre del pasado año, se da cuenta del informe favorable a la oferta económica, pero con la excusa de un recurso en el Tribunal Administrativo de Recursos Contractuales, se le exige a Nautalia una aclaración sobre el cumplimiento de la normativa laboral en función de la dedicación del equipo de trabajo asignado. La empresa contesta a este requerimiento con una declaración responsable en la que acredita que cumplen con el convenio colectivo laboral del sector de agencias de viajes y que dicho convenio “no contempla la obligación del futuro adjudicatario de subrogarse como empleador en determinadas relaciones laborales”.
La respuesta de la mesa de contratación de la APV del 20 de diciembre del año pasado a este documento es fulminante al proponer su exclusión del proceso: “La justificación de presunción de anormalidad es incompleta como consecuencia de la no justificación de los costes laborales y la contestación de una cuestión distinta (no prestación de subrogación)”.
Así pues, a pesar del informe que avala la oferta económica y de obtener la máxima puntuación, Nautalia y el contrato se acabó adjudicando a Europa Travel por un importe de 225.000 euros (272.000 euros con IVA) por ser “la única oferta admitida y cumplir con los requisitos establecidos en el Pliego de Cláusulas Administrativas Particulares”.
La elección de esta empresa tras excluir a la que sacó mejor puntuación no es baladí. Como informó esta redacción, en el momento de llevarse a efecto la adjudicación en el seno del consejo de administración, según consta en la nota informativa del pasado 26 de febrero, la presidenta de la APV, Mar Chao, se ausentó de la reunión por su relación de amistad con Blasco, consejera delegada de la empresa adjudicataria, y delegó en su vicepresidente.
Una decisión que no está exenta de polémica, puesto que el vicepresidente que acabó asumiendo la responsabilidad de la adjudicación fue el líder de la patronal de la Confederación Empresarial de la Comunitat Valenciana (CEV), Salvador Navarro, que al mismo tiempo es el superior en la patronal de Eva Blasco, a quien acabó adjudicando el contrato. Según reza la nota, “por la presente se informa de la suplencia en la condición de órgano de contratación en el procedimiento de adjudicación del 'Servicio de Agencia de Viajes para la Autoridad Portuaria de Valencia' de la Presidencia por la Vicepresidencia de la Autoridad Portuaria de Valencia”.
Compromís denuncia trato de favor
El diputado y coportavoz de Compromís-Sumar en el Congreso, Alberto Ibáñez, ha comentado al respecto que “democratizar el funcionamiento de los puertos del Estado es una tarea pendiente” y ha añadido que “desgraciadamente se han visto casos de enchufismo, nepotismo y de favorecer unas empresas sobre otras”.
En este sentido ha calificado de “escandaloso” el caso del contrato de la agencia de viajes “a pesar de que la presidenta se abstuviese por su vínculo personal con una empresaria, pero que fuera el vicepresidente, el jefe directo de la señora Blasco, quien estuviera en ese tribunal de contratos favoreciendo a esta empresa; vamos a llevar esto a que se investigue en las instancias oportunas”.