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Los Torres cierran Dos cielos para abrir “catedral” de la cocina en Barcelona

Los Torres cierran Dos cielos para abrir "catedral" de la cocina en Barcelona

EFE

Madrid —

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Se llama Cocina Hermanos Torres y lleva la “coletilla” de “nave de los sueños”, porque es “el sueño hecho realidad” de Sergio y Javier. El restaurante, “catedral de la cocina y el producto”, abre el 26 de junio en el barcelonés barrio de Les Corts, para lo que cerrarán Dos Cielos, con dos estrellas Michelin.

Aseguran que “no hay nada que se parezca en el mundo” a este restaurante que ocupa una transformada nave industrial de 800 metros cuadrados y que definen como una “cocina con mesas” que evoca la de su abuela Catalina para “recuperar el recibir, acoger, compartir, la cercanía con la gente”, apuntan en una entrevista con Efe.

Fueron conscientes de su necesidad cuando en 2006 no pudieron plasmar en Dos Cielos, que consiguió el pasado noviembre su segunda estrella Michelin, toda la cocina que llevan dentro. “No podíamos encajarla por falta de infraestructuras y espacio”, dice Sergio Torres.

Tras cinco años buscando local encontraron un antiguo taller de reparación de neumáticos “diáfano, con una energía brutal, con una luz preciosa” que ha transformado Arquitectos OAB en Cocina Hermanos Torres, donde los comensales les verán trabajar en una cocina central y estarán rodeados de las destinadas a cada partida: verduras, pescado y marisco, carnes y aves, repostería y fondos, ésta última para “reivindicar las cocciones lentas”, apunta Javier.

Con una inversión que supera los dos millones de euros -“la libertad tiene un precio y vale la pena pagarlo”, afirma Sergio- han construido su “gran apuesta”, en la que volcarán toda su “experiencia y conocimiento”, aunque eso signifique despedirse de Dos Cielos, “un trampolín maravilloso y una experiencia increíble”.

“Hay que saber dejar. Renunciamos a algo muy importante para nosotros para hacer un proyecto aún mayor”, con el que aspiran a conseguir la tercera estrella Michelin y que definen como “un homenaje al producto, al productor y al cliente” en el que “todo está pensado para que sea una experiencia en todos los sentidos para el comensal”.

Con cerca de 40 trabajadores para 65 clientes, ofrecerá menú degustación y carta, decoración cuidada al detalle y será más que un restaurante, ya que contará con un centro de I+D, un aula de formación, desarrollará un proyecto social para jóvenes en riesgo de exclusión social y con pequeñas discapacidades, y tendrá un Centro Gastronómico de Alto Rendimiento que, al igual que los de deporte, mejorará el conocimiento de los talentos culinarios.

“Estamos llegando a alianzas para aportar en materia de innovación, como unos pianos (cocinas) de porcelana de nueva generación o baños inteligentes”, añaden.

Por eso sostienen los gemelos que “no hay nada que se le parezca”, “si acaso el Espacio Ilusión”, donde crecieron con su abuela Catalina, la que les inculcó un amor por la cocina que les hizo elegir profesión a los 8 años.

“Queremos un restaurante que vaya de Barcelona al mundo. Lo hemos hecho allí porque vivimos allí, pero podría estar en cualquier lugar del planeta”, sostiene Sergio, a lo que añade su hermano que les servirá para mostrar que tienen “mucho que aportar” al universo gastronómico.

También lo seguirán haciendo en Dos Cielos Madrid, que “funciona como un tiro”, y en su programa de La 1 “Torres en la cocina”, que consideran “una bendición” porque “es muy bonito enseñar y la gente se ha enganchado”.

El proceso de nacimiento de esta “nave de los sueños”, que ya admite reservas en su web, se está plasmando en un documental para RTVE y en un libro, porque quieren enseñar que todo es posible con esfuerzo: “Dos chavales de barrio, del Carmelo, demostramos que currando y metiendo energía y siendo constantes se logran los sueños”.

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