Has elegido la edición de . Verás las noticias de esta portada en el módulo de ediciones locales de la home de elDiario.es.

El Ministerio del Interior británico se “infiltra” en refugios para deportar a personas sin hogar

Una persona sin hogar en una calle de Windsor, lugar en el que el líder conservador del ayuntamiento Simon Dudley pidió que se expulsase de la ciudad a todos los homeless antes de la boda del príncipe Harry y Meghan Markle // PA England: Matt Crossick

Diane Taylor

The Guardian —

El Ministerio de Interior de Reino Unido está utilizando información recogida en reuniones sobre inmigración celebradas en organizaciones de caridad y lugares de culto para deportar a personas sin hogar en estado de vulnerabilidad, a quienes les dicen que su asistencia al encuentro conllevará ayudas económicas, según fuentes de The Guardian.

Entrevistas y correos electrónicos internos han revelado que el Ejército de Salvación, gurdwaras (templos del sijismo) y un centro de la comunidad china son algunos de los lugares de Londres que han abierto las puertas a los equipos del Ministerio del Interior para organizar reuniones en espacios que funcionan como refugios para personas sin hogar.

A estas personas les aseguran que las sesiones no forman parte de una política de “ejecución de medidas migratorias”, sino se trata de una vía para ayudar a regularizar su situación. Sin embargo, la iniciativa está a cargo de la unidad de migración del Ministerio del Interior y, si los funcionarios concluyen que una persona no tiene derecho a permanecer en el Reino Unido, pueden pedirle que acepte el retorno voluntario a su país de origen. Si la persona se niega, corre el riesgo de que su caso sea estudiado por el Ministerio y ser deportada de manera forzada.

Los expertos han señalado que esta práctica permite al Ministerio del Interior tener acceso a personas sin hogar en estado de vulnerabilidad que de otra forma no podrían localizar. Además, han advertido que podría ser parte de una estrategia más ambiciosa. El año pasado, The Guardian informó de que el centro para personas sin hogar de San Mungo estaba colaborando con un equipo del Ministerio del Interior que rastreaba indigentes para arrestarlos y deportarlos.

La última información está sustentada en 46 páginas de correos electrónicos entre el Ministerio del Interior y funcionarios del Ayuntamiento del municipio de Redbridge, al este de Londres, que fueron inicialmente obtenidas por el Centro Legal por el Interés Público y que sacaron a la luz la colaboración del Ministerio del Interior con la estrategia del gobierno para combatir la indigencia.

En un correo electrónico al que tuvo acceso The Guardian, un funcionario del Ministerio del Interior le pregunta a un empleado del ayuntamiento: “¿Sería posible que las autoridades locales nos aportaran información sobre indigentes extranjeros para que podamos confirmar su estatus migratorio?”

Invadir espacios seguros

La práctica ha sido criticada por abogados y otros centros de caridad que la han considerado una invasión de los “espacios seguros” de las personas sin hogar, que no hará sino “aumentar la desconfianza que ya existe”.

Una mujer sin hogar, nacida en el Caribe y con numerosos problemas de salud, ha afirmado a The Guardian que el Ministerio del Interior realizaba “intervenciones de inmigración” el primer martes de cada mes en al Ejército de Salvación en Romford, un municipio al este de Londres.

Allí, la mujer entregó información personal y detalles de su estatus migratorio a alguien que ella, según creía, era un consultor legal independiente. Luego descubrió que había estado hablando con un funcionario del Ministerio del Interior. Le pidieron que firmara los documentos de una deportación voluntaria a su país de origen pero ella se negó.

“El Ministerio del Interior se ha infiltrado en sitios como el Ejército de Salvación”, afirmó la mujer. “Llevo 16 años en el Reino Unido y estoy intentando regularizar mi situación. Tengo mi vida aquí y no quiero que el Ministerio del Interior me envíe de regreso a mi país”.

Esta práctica se realiza al mismo tiempo que el  Servicio de Apoyo a Personas Sin Hogar (RSSS, por sus siglas en inglés), una iniciativa del Ministerio del Interior que fue lanzada en agosto de 2018 para “ayudar a personas sin hogar no británicas a resolver sus casos de inmigración”. Igual que durante las “intervenciones de inmigración”, a las personas que acuden a estos servicios se les ofrece la opción del retorno voluntario, aunque el Ministerio del Interior afirmó que, en los casos en que corresponde, a estas personas también se les ayuda a regularizar su estatus migratorio.

Un portavoz del Ministerio del Interior indicó a The Guardian que solo se pregunta la información migratoria de las personas para que el RSSS pueda ofrecerles ayuda.

“En ningún momento se intenta comparar la información con los datos que tiene el Ministerio del Interior”, aseguró. Pero el propio sitio web del RSSS advierte: “Este servicio no ha sido diseñado para ejecutar medidas, pero esto puede depender del análisis de cada caso en particular”.

Tres gurdwaras en el este de Londres han confirmado a The Guardian que funcionaron como sedes de las “intervenciones de inmigración” del Ministerio del Interior: la gurdwara Karamsar en Ilford, Singh Sabha en Barking y Singh Sabha en Seven Kings. “Esas intervenciones del Ministerio del Interior se han realizado en nuestras instalaciones”, afirmó un portavoz.

El Centro de Información y Ayuda de la Comunidad China, ubicado en el Soho de Londres, también ha sido sede de las intervenciones del Ministerio del Interior. Su sitio web informa de que “funcionarios amigables del Ministerio del Interior” estarán presentes. Al mismo tiempo, añade que “el Ministerio del Interior asegura que no se tomarán medidas migratorias durante la intervención”. No se hace referencia a la posibilidad de que se estudie caso por caso. La organización no quiso realizar comentarios para este artículo.

“El objetivo es deportarlos”

James Tullett, director ejecutivo del Refugio y Centro Migratorio de Essex y Londres (Ramfel), ha criticado que la organización de intervenciones del Ministerio del Interior en centros de caridad y organizaciones religiosas. Tullett, a quien el Ministerio del Interior le ha solicitado que entregue información sobre personas sin hogar extranjeras, sugirió que la llegada del frío hace que las organizaciones de caridad intenten encontrar formas de regularizar el estatus migratorio de sus clientes para sacarlos de la calle.

Pero también ha añadido: “Los funcionarios del Ministerio del Interior que llevan a cabo estas intervenciones intentan engañarlos, haciéndoles creer que los van a ayudar y a darles consejos, cuando el verdadero objetivo es deportarlos. Hablan de retorno voluntario pero una vez que tienen a la persona, si ella no acepta el retorno voluntario pueden tomar medidas como detenerla y deportarla sin ningún asesoramiento legal”.

Un portavoz del Centro Legal por el Interés Público señaló que este método no mejora la vida a las personas que supuestamente busca ayudar. “Este esquema solo profundiza la desconfianza que ya existe”, ha añadido el portavoz. “Estamos especialmente preocupados porque la presencia del Ministerio del Interior se presenta como ”consultoría“ cuando en realidad son los servicios de inmigración con objetivos de deportación”.

Un portavoz del Ejército de Salvación ha afirmado: “Algunas personas sin hogar que asisten a nuestro centro en Romford le dijeron a nuestro personal que querían regularizar su situación migratoria y por eso nos acercamos al Ministerio del Interior. Tenemos un servicio mensual de consultoría al que asisten otros servicios, como apoyo para conseguir empleo, dentistas y el equipo local de salud mental. La asistencia es voluntaria y cada persona decide con qué agencia hablar”.

Un portavoz del Ministerio del Interior negó que estuvieran utilizando a organizaciones de caridad o a ayuntamientos locales para deportar personas sin hogar. “Las intervenciones de inmigración le dan la oportunidad a muchas personas de hablar con funcionarios sobre los pasos a seguir para regularizar su situación u obtener asesoramiento para efectuar un retorno voluntario”, dijo el portavoz. “Los funcionarios dejan en claro que trabajan en el Ministerio del Interior y no ofrecen consejos sobre temas migratorios”.

Traducido por Lucía Balducci

Etiquetas
stats